Jóvenes atacaron en masa un local comercial situado en el centro de Concepción, sustrayendo diversas especies sin que los dependientes pudieran evitarlo. Esta técnica delictual se está haciendo común en la ciudad.

Como si se tratara de una jauría, un grupo de jóvenes atacó el local Mercadito, situado en calle Cochrane con Anibal Pinto, sustrayendo diversas especies sin que los dependientes pudieran evitarlo.

La estrategia es sencilla. Como son varios, cada uno toma algún producto, principalmente alcohol, y escapan sin siquiera correr, porque la superioridad numérica frente a los administradores o clientes les permite actuar impunemente.

No es primera vez que el negocio sufre una acción de este tipo y no es el único local afectado por esta forma de actuar, según indicó el capitán Patricio Meza, de la 1º Comisaría penquista.

El oportuno aviso a Carabineros permitió que al menos dos de los autores del delito fueran detenidos, pero fueron dejados libres tras comprobar su domicilio, no porque fuesen menores de edad, ambos de 17 años, sino porque hubo una discrepancia en la calificación jurídica del delito.

Mientras Carabineros informó que se trató de un robo, el Ministerio Público determinó que hubo hurto, amenazas y daños, ya que una ventana fue destrozada. No existió intimidación con armas o golpes a los trabajadores del recinto, por lo que no calificó como delito violento y los jóvenes y sus padres quedaron citados a la fiscalía.

El local cuenta con cámaras de seguridad, material que fue derivado a Carabineros para su análisis.