Cuando se trata de ahorrar, cualquier medida, por más pequeña que sea, ayudará a la economía del hogar. Desde desenchufar los artículos que no estás usando hasta disminuir el tiempo que te demoras en la ducha, permitirán que tus cuentas experimenten una baja; sobre todo considerando que durante el invierno las boletas de electricidad o gas tienden a subir.

Según recomendó el Sernac, existen algunos sencillos consejos para conseguir este objetivo, por ejemplo, realizar una simple revisión en la instalación eléctrica de nuestro domicilio.

1.- Fugas de electricidad: Apaga todas las luces durante el día, desconecta todos los aparatos eléctricos y, luego, verifica que el disco del medidor NO continúe girando. Si no es así, deberás revisar tu instalación.

2- Conexión de aparatos eléctricos: Ten la precaución de nunca conectarlos todos en un mismo enchufe, ya que puede sobrecargar su instalación y producir un sobrecalentamiento, el que podría derivar en un incendio.

3.- Iluminación: Algunas ampolletas son muy económicas, por ejemplo, las fluorescentes consumen lo mismo que las de filamento pero iluminan más. En tanto, las lámparas de halógeno cuestan más pero iluminan mejor. Si realizas una correcta combinación de estos recursos, podrás conseguir un ahorro significativo. Además, debes considerar que una ampolleta normal sólo llega a durar 1.500 horas, mientras que una de bajo consumo entre 6.000 y 8.000 horas.

Esto con respecto a las recomendaciones del Sernac, pero también hay otros pasos que te permitirán conseguir una disminución en tus cuentas. (vía Consumers.es y Lacasasostenible.com)

4.- Lavado: Si deseas lavar tu ropa, lo ideal es que sea con carga completa y una vez por semana, y de preferencia usando los detergentes líquidos pues hacen trabajar menos la lavadora que los sólidos. Debes considerar también no utilizar más del recomendado, ya que un exceso de espuma la hace trabajar más. Por último, ten la precaución de limpiar frecuentemente el filtro.

Con respecto a la loza, si tienes poca para lavar puedes usar simplemente el agua de la llave, pero si tienes una cantidad mayor, es mejor que hagas un jaboncillo en un recipiente grande o en el mismo lavalozas, colocando la tapa.

5.- Plancha: Al igual que con el lavado, es recomendable hacerlo una vez por semana y luego de haber acumulado toda la ropa que debes planchar, ya que calentar este artefacto sólo para un par de prendas resulta caro. Además, recuerda también adaptar el programa a la ropa que estés planchando.

Ojo, pues es aconsejable comenzar con la ropa más gruesa y dejar la más delgada para el último, pues con ésta puedes apagarla y aprovechar el calor residual. Otra recomendación es no secar la ropa con la plancha (si no necesitas la prenda con urgencia), pues el consumo es mayor.

6.- Refrigerador: Éste es el electrodoméstico que más consume, por lo que debes tener cuidado con varios puntos. Por ejemplo, comprobar que la puerta sella bien colocando una linterna encendida en el interior y apagando la luz del lugar donde está ubicado.

Además, limpia regularmente la nevera por dentro y por la parte posterior, ya que una capa de hielo de 3 mm de espesor la hace incrementar el consumo energético en un 30% aproximadamente. Sumado a esto, calibra el refrigerador a la temperatura necesaria, evita abrirlo en reiteradas ocasiones y déjalo en un lugar fresco para que no trabaje de más.

7.- Televisores: Si comparamos los televisores LCD con los LED, estos últimos ahorran un 50% de energía aproximadamente, por eso es recomendable siempre que se pueda, privilegiar su compra.

Con respecto a la cantidad de televisores que hay en un hogar, es aconsejable que si en dos habitaciones están viendo el mismo programa, apaguen uno y disfruten de éste en familia.

8.- Computadores: Lo mejor es utilizar protectores de pantalla que la dejen en negro, y si no estás ocupando el computador o notebook, apágalo. Ten presente además que si lo tienes en stand by también consume energía.

9.- Cocina: Si vas a cocinar intenta usar la olla a presión siempre que puedas, pues consume la mitad de la energía. Cuando el líquido comience a hervir, baja la llama, pues en este punto necesita menos calor. También se aconseja que la olla a presión se deje enfriar poco a poco, aprovechando el calor residual para la cocción.

Con respecto al microondas, intenta usarlo sólo para cantidades pequeñas de comida, ya que así se ahorra más del 60% electricidad. El horno, a gas o eléctrico, también es un gran consumidor, así que ocúpalo sólo para grandes porciones, como por ejemplo, asados. Procura abrir lo menos posible la puerta, ya que cada vez que lo haces, se pierden grandes cantidades de energía.

Así también hay otros simples y fáciles consejos, como:

10. – Hervir agua y dejarla en el termo para que mantenga su temperatura.
11. - Poner una botella con agua al interior del estanque del baño, así se perderá menos agua al tirar la cadena.
12. - Si quieres descongelar un alimento, no uses el microondas. En vez de esto saca la comida del congelador y guárdala en la parte de abajo.

Como te habrás dado cuenta, hay un sinfín de forma para consegur disminuir las cuentas del hogar. Es por eso que debes aprender a realizar un uso eficiente de los aparatos eléctricos y no olvidar que aquellos que producen calor consumen más electricidad.