Los catorce acusados de la muerte del hincha francés de fútbol Brice Taton, salvajemente agredido en Belgrado en septiembre de 2009, fueron condenados a penas de entre 4 y 35 años de prisión, anunció este martes la jueza del Alto Tribunal de la capital serbia.

Doce de los inculpados fueron declarados culpables de “asesinato” y dos de “violencia”, precisó la jueza.

“Son culpables de haber agredido, el 17 de septiembre de 2009, de forma planificada y organizada, a ciudadanos franceses, aficionados del Toulouse, y de haber matado a Brice Taton”, declaró la jueza, Mirjana Ilic, en su introducción.

Djordje Prelic, uno de los dos acusados que no han sido todavía detenidos, recibió la pena mayor, 35 años, y otro fugitivo, Dejan Puzigac, fue condenado a 32 años de prisión, indicó la misma fuente.

Estas dos personas figuraban en cabeza del acta de acusación leído al inicio del proceso.

Ivan Grkovic y Ljubomir Markovic, que figuraban después en la misma acta, recibieron penas de 30 años de prisión.

Los dos acusados de violencia, Dejan Stankovic y Stepa Petrovic, fueron condenados respectivamente a 4 y 5 años de prisión.

Según la jueza, todos los acusados golpearon a Brice Taton con “bates de madera y bengalas (fumígenos), pateando su cabeza y su cuerpo”, arrastrando después al aficionado francés hacia una escalera próxima.

“Algunos de ellos”, añadió Mirjana Ilic, empujaron “intencionadamente” su cuerpo al vacío. La jueza no dio los nombres de los que cometieron esta última acción.

Importantes medidas de seguridad fueron tomadas durante la lectura del veredicto, que tuvo lugar ante una sala llena, en presencia de varios representantes de las familias de los acusados, que expresaron ruidosamente su descontento. Algunos lloraban, otros gritaban y lanzaban frases sarcásticas contra la jueza.

Los padres de Brice Taton, silenciosos, también estaban presentes, junto al embajador de Francia en Belgrado, François-Xavier Deniau.

Brice Taton viajó a la capital serbia para apoyar al Toulouse en su partido de la Europa League del 17 de septiembre de 2009 contra el Partizan de Belgrado.

Unas horas antes del encuentro, cuando se encontraba en una terraza de un bar con algunos de sus amigos, en el centro de Belgrado, Brice Taton y sus compañeros fueron atacados con una violencia extrema por aficionados serbios.

Gravemente herido en la cabeza y en el pecho, Brice Taton murió el 29 de septiembre en un hospital de Belgrado, tras doce días de agonía, cuando tenía 28 años.

La agonía y la muerte de Brice Taton suscitaron una gran emoción en Francia, y también en Serbia, sacando a la luz el problema de la violencia en el fútbol del país balcánico, lo que hizo que interviniera el propio presidente Boris Tadic.