Un asesor del depuesto presidente hondureño Manuel Zelaya desmintió las versiones de prensa sobre un regreso voluntario a Honduras del exgobernante, para enfrentar a la justicia por los cargos de corrupción y otros delitos que pesan sobre él.

“Son falsas esas informaciones. El coordinador del Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP) no va a regresar a someterse a los verdugos que le dieron el golpe de Estado” el 28 de junio de 2009, aseguró el asesor Rasel Tomé a la AFP.

El local diario El Heraldo afirmó que “los abogados defensores del depuesto presidente (…) acudieron a los tribunales para entregar la solicitud de la presentación voluntaria del ex presidente”, que está acusado de dos delitos de corrupción y uno político.

La nota aseguró que la esposa del exgobernante, Xiomara Castro, y uno de sus hijos, ya volvieron a Tegucigalpa desde República Dominicana.

“Ella viene con frecuencia a Honduras a realizar actos familiares” y regresa a Santo Domingo, donde Zelaya está exiliado desde el 27 de enero de este año, cuando dejó el régimen de facto entregó el poder al presidente Porfirio Lobo.

Zelaya fue derrocado por los militares en alianza con los poderes del Estado y sectores influyentes del país, cuando pretendía –pese a la oposición de la Justicia y el Congreso– realizar una consulta popular con el fin último de reformar la Constitución, supuestamente para perpetuarse en el poder.

Según Tomé, no hay condiciones para que regrese a Honduras porque en el gobierno de Porfirio Lobo “se reprime a los campesinos, obreros y a los miembros del Frente de Resistencia y todo queda con un manto de impunidad”.