El proceso se realizó el pasado domingo, y el último cómputo del Tribunal Electoral dio como ganador para ocupar la presidencia de la JS al ex dirigente secundario César Valenzuela, con un 67,8% contra el 32,2% de la actual vicepresidenta, Mariana Arellano.
Sin embargo, esta última se niega a reconocer el resultado hasta que el Tribunal Supremo se pronuncie sobre una serie de irregularidades denunciadas por su lista.
La dirigenta aseguró que hubo un fraude marcado, entre otros hechos, por impedimentos para que algunos militantes votaran, la suplantación de votantes y la negativa del Tricel a enviar materiales a diversas comunas.
Mariana Arellano aseguró que están dispuestos a llegar a instancias judiciales superiores y no descartó un quiebre en la Juventud Socialista.
A pesar de esto, Víctor Rodríguez y Diego Ganga, candidatos al comité central por la lista que encabeza Mariana Arellano, reconocieron el triunfo de César Valenzuela e instaron a su sector a admitir la derrota. Incluso, aseguraron que la negligencia de sus propios representantes ante el Tricel, con continuas inasistencias es la que ha sembrado la incertidumbre electoral sobre el proceso.
Por su parte, el actual presidente de la JS, Daniel Melo, quien respaldó la candidatura de Valenzuela, descartó cualquier irregularidad y afirmó que detrás de la denuncia están los sectores del partido que apoyaron la candidatura presidencial de Marco Enríquez Ominami.
Daniel Melo agregó que César Valenzuela obtuvo una amplísima ventaja de más de 400 votos sobre Mariana Arellano, lo que hace irrefutable su derecho a convertirse en el nuevo presidente de la Juventud Socialista.