Un grupo de manifestantes montó este sábado una precaria casa con escombros y pedazos de madera en plena playa de Copacabana para protestar por las condiciones de vida en las centenas de favelas de Rio de Janeiro, constató un periodista de AFP.
Los escombros y sobras de madera fueron recogidos por una organización no gubernamental en diversas favelas de la ciudad severamente afectadas por las lluvias torrenciales y deslizamientos de lodo hace dos semanas, en particular Morro do Bumba, en la vecina Niteroi, donde perecieron más de 30 personas.
Un grupo de niños con mordazas jugaba en torno de la precaria vivienda, al tiempo que otros manifestantes recorrían la playa preguntando a los transeúntes si las autoridades debían mantener la prioridad para las obras destinadas a los Juegos Olímpicos de 2016 o en la construcción de viviendas para los evacuados.
El titular de la ONG Rio de Paz, Antonio Costa, dijo que el objetivo de la protesta es “dar voz a esas personas”, muchas de las cuales sobrevivieron a los deslizamientos de lodo de hace una semana pero perdieron todas sus pertenencias.
Las lluvias torrenciales caídas en Rio hace dos semanas dejaron un saldo provisorio de 250 muertos y unos 14.000 desalojados, además de un enorme rastro de destrucción por los constantes deslizamientos de lodo en las faldas de los cerros existentes en toda la ciudad y sus alrededores.
En la favela de Morro de Bumba aún no fue definida la cifra de desaparecidos a causa del enorme deslave, aunque vecinos coinciden en que la avalancha de lodo y basura arrastró o sepultó a unas 200 personas.