Comenzó a desmantelarse el Programa de Derechos Humanos del Ministerio del Interior tras la elección de Sebastián Piñera como Presidente de la República.

En conversación con Radio Bío-Bío, el abogado Boris Paredes confirmó su renuncia a esta instancia, que desde 1997 representa en forma gratuita ante los tribunales de Justicia a los familiares de las víctimas de la Dictadura.

El profesional dijo que tenía desconfianza de las nuevas autoridades, aunque reconoció que lamentaba dejar causas como la del caso calle Conferencia y ‘Caravana de la Muerte’.

Además, la secretaria ejecutiva del programa, Rosemarie Bornard, debe abandonar su cargo en marzo próximo, ya que es de exclusiva confianza del Presidente de la República.