La Unión Demócrata Independiente (UDI) desechó la idea de imponer sanciones internas al diputado Ignacio Urrutia luego que en el Congreso calificara de “terroristas” a víctimas de atropellos a los Derechos Humanos en dictadura.

La presidenta del gremialismo, la senadora Jacqueline Van Rysselberghe, entregó su apoyo a Urrutia. A su parecer, el problema estuvo en la forma de lo expresado, pero para ella el fondo sí tendría relación con la realidad.

“Si bien es cierto que la forma de los dichos del diputado Urrutia no corresponden, también es cierto que hay personas, por ejemplo el asesino de Simón Yévenes, que recibía o todavía recibe una pensión de reparación“, indicó.

Desde el Partido Por la Democracia (PPD) criticaron la falta de sanción indicando que corresponde a una derecha conservadora que justifica el régimen de Augusto Pinochet.

El diputado fue derivado a la Comisión de Ética de la Cámara por sus dichos, donde podrían determinar el pago de una multa de hasta el 15% de su sueldo.