Un estudio de la consultora Socialis, elaborado para la Comisión Asesora Presidencial de Pensiones, dio a conoce cómo los chilenos perciben la jubilación de los funcionarios de Fuerzas Armadas.

De acuerdo al informe Sistematización de audiencias y estudio cualitativo sobre estrategias de previsión y perspectivas ante la tercera edad, los civiles en nuestro país consideran que existe una desigualdad entre ellos y los efectivos de las FF.AA., según informa La Tercera.

Ello porque muchos consideran que los uniformados jubilan a una menor edad, con tasa de reemplazo mayor en comparación al resto de los trabajadores, y con pensiones que son aportadas por la ciudadanía, es decir, los encuestados estimaron que “los civiles financian todos esos años de improductividad”.

El documento afirma que “lo que se observa en esos diagnósticos, es esta sensación de desigualdad en términos de que (en las FF.AA. y de Orden) tienen una condición favorable de jubilación, y que es con plata de todos los chilenos. Esto, versus el esfuerzo, de quienes no pertenecen a esas entidades, de incluso extender su vida laboral para obtener una mejor pensión.

Efectivamente, el sistema previsional en Chile funciona de distinta manera para los civiles y los uniformados. Esto cambió durante la dictadura de Augusto Pinochet, cuando los trabajadores tuvieron que acogerse al método de las AFP, mientras que los efectivos militares se mantuvieron en el régimen de reparto.

¿Cuál es la diferencia entre las pensiones que reciben los civiles y los uniformados en Chile? Los trabajadores “comunes” ganan una jubilación $197.000 en promedio, indican datos de la Superintendencia de Pensiones.

En ese sentido, un estudio de Fundación SOL acota que actualmente el 93,1% de las mujeres pensionadas y 87,3% de los hombres obtienen menos de $147.763 mensuales.

A los oficiales en retiro de las Fuerzas Armadas se les paga entre $1.489.497 y $1.622.680 en promedio al mes, y a los suboficiales entre $557.066 y $676.580, de acuerdo a cifras de Capredena.

Los uniformados se retiran a una edad promedio de 53 años. Los civiles deben laborar hasta los 60 años en el caso de las mujeres, y hasta los 65 los hombres.