El asunto es de manual, el más básico de la política. El poder se debe ejercer siempre. Por eso las vacaciones y el silencio total impuesto por Michelle Bachelet durante el período estival ha sido un error de principiante. El “silenzio stampa” sólo funciona en el fútbol, a veces.

El silencio ha provocado el “desorden” que tanto molesta a Bachelet. Osvaldo Andrade, el presidente de su partido, critica la ausencia de vocería en verano. Jaime Quintana, presidente del PPD, dice que no sabe qué es lo nuevo que podría aportar alguien como Álvaro Elizalde.

Lo malo para él es que Elizalde ha sido nombrado vocero del Gobierno de Bachelet, por lo que debiera esperar que ese “alguien” aporte algo.

Ricardo Lagos Weber notifica que el “círculo de hierro” se acaba el próximo 11 de marzo. Pero todo comenzará a terminar el próximo lunes. Sepa lo que comienza a resolverse desde la semana que se inicia.