El comportamiento “pasivo-agresivo”, se produce cuando expresamos indirectamente nuestros sentimientos negativos, en vez de referirnos a ellos abiertamente.

Este tipo de conductas comúnmente son utilizadas para expresar la ira oculta.

En este contexto, la licenciada en Trabajo Social Signe Whitson, detalló al sitio especializado Psychology Today, 8 frases comunes “pasivo-agresivas”, que pueden servirte como advertencia para reconocer estas conductas en tu pareja o amigo:

1. “No estoy enojado(a)”

Según explica la especialista, negar los sentimientos de enojo es un clásico comportamiento de las personas “pasivo-agresivas”.

“En lugar de ser abiertos y honestos cuando se les cuestiona sobre sus sentimientos, este tipo de personas insisten en que no están enojadas incluso cuando por dentro están furiosas“, describe.

2. “Era un chiste”

Asimismo, utilizan el sarcasmo como una herramienta frecuente. Estas frases son empleadas en voz alta, pero de maneras indirectas y “socialmente aceptables”.

“Si muestras que te ofende el sarcasmo ácido y pasivo-agresivo, la persona hostil se pone en su papel de víctima diciendo: ‘¿No puedes soportar un chiste?’“, complementa.

3. “Bueno, como quieras”

Otra conducta o estrategia frecuente, es alejarse luego de una discusión. Del mismo modo, suelen emplear frases como “bueno” y “como quieras”, para expresar enojo indirectamente.

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4. “Creí que sabías”

“A veces, el crimen pasivo-agresivo perfecto tiene que ver con la omisión”, reflexiona la especialista.

Este tipo de personas pueden expresar su enojo de manera encubierta, decidiendo no compartir información que podría evitar un problema.

De este modo, al mostrarse ignorante sobre el tema, la persona defiende su falta de acción, mientras disfruta la angustia del otro.

5. “¡Ya voy!”

“Las personas pasivo-agresivas son conocidas por aceptar verbalmente una solicitud, para luego retrasar su compleción“, plantea Whitson.

Un ejemplo común, es cuando una madre le pide a su hijo que limpie su habitación. Él responde: “Sí, ya voy”, pero luego no completa la tarea. “Probablemente está practicando el arte pasivo-agresivo de cumplimiento temporal”, apunta.

6. “No sabía que lo querías de inmediato”

“Mientras que a todos nos gusta retrasar tareas desagradables de vez en cuando, ellos cuentan con la procrastinación (postergación o posposición) como una manera de frustrar a los demás y/o librarse de ciertas tareas sin tener que rehusarse directamente”, explica.

7. “Claro, me encantaría”

En este caso, plantea el ejemplo de un operador telefónico que cuando le pides ayuda, muestra una actitud amable y te asegura que resolverá tu problema.

En apariencia coopera, pero cuídate de la sonrisa enojada: tras bambalinas, puede estar tirando tu solicitud a la basura y poniéndole un definitivo ‘denegar’ a tus documentos”, advierte.

8. “¿Por qué te enojas tanto?”

Finalmente, Whitson señala que este tipo de personas son maestras en mantener la calma y fingir confusión, cuando los demás explotan de ira por alguna situación.

“De hecho, la persona disfruta encender a los demás de tal manera que pierden el control y cuestionan sus ‘reacciones exageradas’“, concluye.