Preparar panqueques parece ser una receta sencilla, pero debes considerar que un mínimo error en la medida de sus ingredientes, puede generar un resultado completamente diferente al esperado.
La receta básica de esta preparación requiere: 1 ½ taza de harina, 1 ½ taza de leche, 1/2 cucharadita de sal, 2 cucharadas de azúcar, 2 cucharaditas de polvo de hornear y dos huevos.
Pero, ¿qué pasa si añadimos más cantidad de la especificada? Esa fue la interrogante que intentó responder el sitio Insider. A través de una serie de fotografías, demostraron qué pasa cuando intentas experimentar en la cocina.
Con mucha o poca harina
Al agregar harina adicional a la mezcla (fotografía de la izquierda), el panqueque resultó ser más esponjoso y se elevó más de 2 centímetros.
“Si bien eran más esponjosos por dentro, no estaban completamente secos. Y aunque la textura se volvió un poco pegajosa mientras masticaba, estaba sabroso”, detalla la redactora Rachel Askinasi, quien hizo el experimento.
En el caso de usar la mitad de la harina requerida (fotografía de la derecha), la masa quedó demasiada líquida y el resultado fueron panqueques extremadamente delgados.
“Cuando los saqué del sartén, descubrí que estaban muy aceitosos al tacto y me dejaron grasa en las manos. Y sin suficiente harina, el sabor era ‘pesado’ en sal”, describió.
Con y sin azúcar extra
En términos de textura y tamaño, al usar azúcar extra, los panqueques quedaron húmedos por dentro y se elevaron a aproximadamente 0,6 centímetros.
“No solo eran dulces, sino que se podía saborear claramente el azúcar granulada que usé en la masa“, detalla sobre el ejemplo registrado en la fotografía de la izquierda.
Del mismo modo, no usar suficiente azúcar, dio como resultado, panqueques que “notablemente no eran dulces”. “La textura era húmeda en todas partes”, añadió.
Demasiado polvo de hornear
“Es fácil confundir las instrucciones que requieren una cucharadita”, advirtió Askinasi. Entonces para este caso, usó una cucharada de polvo de hornear.
Como resultado, los panqueques quedaron extremadamente ligeros, aireados, esponjosos, y se elevaron cerca de 0,6 centímetros. Asimismo, “el sabor era perfecto”.
De este modo, “si añades una ‘cucharada’ en lugar de ‘cucharadita’, no te preocupes, tus panqueques probablemente serán deliciosos de todos modos”, aseguró.
Usar mucha leche
“Usé el doble de la cantidad de leche para estos panqueques. A pesar de que la masa estaba líquida, quedaron delgados y el sabor era realmente bueno“, describió sobre este ejemplo.
No obstante, tuvo que regular la llama de la cocina, ya que el primero se quemó. “Entonces, si está buscando hacer panqueques como este, les recomiendo cocinarlos a fuego medio-bajo y vigilarlos de cerca“, aconsejó.
No usar la leche suficiente
Al usar menos leche que la especificada, los panqueques quedaron con una masa más espesa, pero esponjosa. Además, tardaron más en cocinarse que los demás.
“El sabor era bastante adecuado para lo que esperarías de un panqueque tradicional”, aseguró. Sin embargo, lo que más llamó la atención, es que tenían más de 2,5 centímetros de grosor.
Con huevos extras y sin ellos
“Añadí más huevos en este caso (fotografía de la izquierda), lo que generó un panqueque sólido y ondulado. Eran más pesados en comparación a los otros“, describió.
En el caso contrario (fotografía de la derecha), sin utilizar huevos, la dulzura de la leche se hizo más potente en el sabor de los panqueques.
“Si no tiene huevos o quieres guardarlos para otra preparación, en mi opinión, simplemente dejarlos fuera de esta receta es una buena opción“, aconsejó finalmente.
