El triunfo de los talibanes en Afganistán tras la toma de posesión de su capital Kabul, ha causado preocupación internacional por la situación de las mujeres en el país de Medio Oriente.

Tal como contó BioBioChile, en 1996 y 2001, los talibanes que ya habían estado en el gobierno se rigieron por ley islámica que impedía a las mujeres afganas estudiar o trabajar, salir de casa si no eran acompañadas de un miembro masculino de su familia y les obligaba a llevar el burka (velo integral) en público.

Según reportó la AFP, las flagelaciones y ejecuciones, incluso la lapidación por adulterio, eran prácticas habituales en las plazas y estadios de las ciudades.

¿Cómo era la vida antes?

Una fotografía de Getty Images muestra a tres jóvenes estudiantes vistiendo minifaldas mientras caminan por Kabul en 1972, “a pesar de las críticas violentas de la mayoría del pueblo afgano, todavía apegado a las tradiciones musulmanas”.

Todo esto, antes del arribo al poder de los talibanes en 1996, en un país que ha vivido años convulsos en medio de un ambiente bélico por la invasión previa de la Unión Soviética y la posterior intervención estadounidense.

Mina, una joven afgana residente en Madrid, dijo a la agencia EFE que en casa de sus padres tiene fotos de su tía en Kabul en la década de 1970, vestida con minifalda y atuendos de moda, como cualquier mujer urbana en aquella época.

“No es retroceder unos años, es volver a la edad media”, aseguró con firmeza. Ella se casó libremente con su marido en 2019 y ambos viven desde entonces juntos.

Según señaló CNN, las mujeres podían vestir al estilo occidental, acudir a las universidades y estudiar, mientras convivían las costumbres de ambas latitudes.

En 2017, no obstante, Ali M. Latifi, periodista independiente de Kabul, dijo a BuzzFeedNews que “ese era un porcentaje muy pequeño de personas privilegiadas en algunas ciudades”.

¿Regreso a 1996?

La agencia Reuters informó, citando a un líder talibán que no fue identificado, que aún es demasiado pronto para decir cómo pretende el grupo islamista asumir el poder en Afganistán.

“Queremos que todas las potencias extranjeras se vayan antes de empezar a reestructurar la gobernanza”, dijo, recoge Radio France Internationale.

Mientras, el presidente afgano Ashraf Ghani abandonó el país este domingo cuando los talibanes parecían estar a punto de ingresar a Kabul. La información fue más tarde confirmada por el propio mandatario, quien señaló que “los talibanes ganaron”.

“Ahora son responsables del honor, de la posesión y de la autopreservación de su país”, apuntó Ghani en un mensaje en Facebook. “Ahora se enfrentan a una nueva prueba histórica. O bien preservan el nombre y el honor de Afganistán o bien le darán prioridad a otros lugares y redes”, añadió.