Tras confirmarse el compromiso de Meghan Markle con el príncipe Harry, comenzó un frenesí del público por conocer a la actriz de 36 años, quien pese a que se unirá a la familia real, no podrá acceder al título de princesa.

Esto debido a las estrictras reglas protocolares de la realeza, las que indican que como Markle no nació dentro de una Casa Real, no podrá llevar aquel título. Lo mismo que ocurrió con Kate Middleton, aunque no así con Lady Di.

La madre de William y Harry pertenecía a la casa de Spencer, y era hija de John Spencer, VIII conde de Spencer, y de Frances Ruth Burke Roche, hija de Mauricio Roche, IV barón de Fermoy. Gracias a esto cuando contrajo matrimonio con el príncipe Carlos, pudo convertirse en “Su Alteza Real, la Princesa de Gales”.

express.co.uk/
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En el caso de Meghan, se espera que una vez que contraiga matrimonio con Harry, pase a llevar el título de Duquesa de Sussex, el cual había sido guardado por la reina Isabel II durante años para otorgarlo a la mujer que se casara con su nieto.

El ducado previamente había sido llevado por Augusto Federico, el hijo del rey Jorge III, quien murió sin descendencia por lo que dejó disponible aquel título.

Otro de los títulos disponibles para la pareja es el de duque y duquesa de Clarence, aunque expertos aseguran que es muy poco probable, ya que está marcado por el estigma de la mala suerte.

“Uno de los duques de Clarence fue el hijo mayor de Eduardo VII y hay muchos rumores sobre él”, señaló al diario inglés Telegrah,Charles Kidd, experto en genealogía.

Según el experto, el duque fue perseguido toda su vida por rumores sobre su intelecto, sexualidad y salud mental. También era sospechoso de ser Jack el Destripador.

Otros dos duques de Clarence fueron acusados de traición y sentenciados a muerte por sus crímenes. Por lo cual es muy poco probable que la joven pareja acepte tal honor.