La hipertensión arterial es una enfermedad que afecta a más del 73% de los adultos mayores sobre los 65 años, sin embargo, también puede estar presente en personas más jóvenes en ambos casos provocando daños irreversibles al cerebro.

Este martes es el Día Mundial de la Hipertensión Arterial, jornada dirigida a promover el cuidado y prevención de la enfermedad.

El 70% de los casos se encuentran entre los 30 y los 70 años a nivel mundial y, de acuerdo a la revista de Medicina de la Universidad de Chile, afecta a más del 73.3% de los mayores de 65 años en el país, causando una de cada siete muertes en este rango etario.

Usualmente, la hipertensión arterial es asintomática, esto ya que sus síntomas también pueden aparecen en personas totalmente sanas, como lo son el dolor de cabeza, hemorragias nasales, mareo, rubor facial y cansancio, detalla el manual de medicina MSD.

No obstante, cuando estos signos aparecen en personas que además tienen algún trastorno renal, hormonal y/o diabetes y apnea del sueño, las posibilidades de que se trate de hipertensión arterial son más altas.

¿La hipertensión arterial puede producir daño cerebral?

Esta enfermedad que aunque a menudo no genera mayores molestias, si causa estragos en la salud general del cuerpo.

De acuerdo al cardiólogo y director médico de RedSalud Santiago, Javier Gárate, “de no controlarse adecuadamente, puede ocasionar una mala calidad de vida y aumentar considerablemente el riesgo de padecer enfermedades cardíacas, renales y cerebrales“.

Respecto a estas últimas el profesional detalla que se producirían debido a que la enfermedad genera lesiones de los vasos sanguíneos del cerebro.

La hipertensión arterial “daña las vías estrechando y rompiéndolas, esto, a su vez va produciendo pequeños y múltiples infartos que en el tiempo ocasionan deterioro cognitivo”, explica Gárate.

En consecuencia “las arterias se vuelven más rígidas y estrechas lo que provoca que el cerebro no recibe oxígeno y nutrientes suficientes”, dice el profesional.

De esta manera puede causar “la muerte de las neuronas cerebrales y el consiguiente accidente cerebrovascular o infarto”, dice el cardiólogo. No obstante, en ocasiones “estas arterias se pueden romper y causar una hemorragia”, detalló.

¿En qué casos es más frecuente?

El cardiólogo detalla que quienes son más propensos a sufrir el daño cerebral provocado por esta enfermedad son quienes no tienen un correcto control de la patología.

Es decir, pacientes que no siguen el tratamiento farmacológico, los cambios en la dieta y que no realizan controles periódicos.

Las señales más frecuentes de que se puede estar sufriendo de daño cerebral causado por la hipertensión arterial son síntomas relacionados con funciones básicas como la memoria, concentración y conducta, señala el cardiólogo.

No obstante, en muchos casos, dados los antecedentes de la enfermedad, es probable que el deterioro se vea reflejado recién después de que una persona “debute con accidente cerebrovascular usualmente hemorrágico”.