Las fiestas patrias es una de las celebraciones más importantes que se realizan en Chile. Todos y todas esperan con ansias la llegada de los feriados de septiembre para descansar y celebrar con panoramas al aire libre, viajes interregionales, cenas familiares, etc. Esto trae consigo un sinfín de gastos adicionales y en el escenario actual, con una tasa de inflación que no da tregua, tratar de ahorrar cada peso es fundamental. En esta línea, el ansiado aguinaldo por fiesta patrias aparece como un salvavidas para muchos colaboradores.

Según un estudio de Chiledeudas.cl, 70% de las empresas en Chile otorgarían el aguinaldo, un 40% de los trabajadores encuestados manifestó que utilizarían el dinero para pagar deudas, 45% de los encuestados lo usaría en un asado, 10% lo tendrá como parte de su sueldo mensual para comprar insumos básicos y solo un 5% lo ahorrará.

Si bien para las empresas del sector privado no es una obligación otorgar aguinaldo a sus colaboradores, esto hay que verlo como una inversión, una herramienta motivacional a futuro, sobre todo para las organizaciones que cuentan con el flujo para hacerlo. Es importante brindar incentivos para que la gente se sienta más satisfecha y, en consecuencia, su productividad sea positiva.

Debemos ser flexibles y apuntar a tener una mirada más abierta, el aguinaldo o compensación extra, ya sea económica, gift card, canasta familiar o de otro tipo independiente de cuál sea su valor, podría generar una motivación entre los colaboradores que sin duda se manifestará en gran medida dentro de la organización. Es por esto que este aguinaldo debe enmarcarse en un ecosistema de acciones virtuosas en pro del clima laboral y la retención de talentos.

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