La Brigada de Derechos Humanos de la Policía de Investigaciones desacreditó penalmente la acusación que se realizó sobre la existencia de un presunto “centro de tortura” al interior de la estación Baquedano del Metro de Santiago.

La denuncia fue realizada por un estudiante a los cinco días de iniciado el estallido social en octubre de 2019. La información se dio a conocer a través de un mensaje de WhatsApp en el que se señaló que “cabros, con mucha tristeza les comento que se supo de un centro de retención Estación Baquedano (tiene “comisaría interna”). Se encontró sangre y amarras. Anoche dos jueces del 7mo. Juzgado de Garantía (cuya jurisdicción es Santiago) dan cuenta de que se torturó gente. Supieron por el relato de un menor de edad”, según consignó La Tercera.

La acusación fue originada a raíz del relato de Nicolás Lüer (22) quien -de acuerdo al recurso que se presentó en el Séptimo Juzgado de Garantía- habría sido llevado por Carabineros mientras se encontraba en una de las escaleras del ingreso de dicha estación, tras haber asistido a las manifestaciones en Plaza Baquedano junto a dos amigas.

“Lo habrían tomado de sus cuatro extremidades y golpeado hasta luxarle la rodilla. Según refiere, se encontraba muy conmocionado y shockeado, relatando que en la bajada del Metro Baquedano habría visto a efectivos de Carabineros, quienes habrían mantenido amarrados de las manos a ‘cabros’ y les habrían disparado a quemarropa, desconociendo el tipo de arma utilizada”, se acusó en la acción judicial.

A raíz de esta situación, los jueces Darwin Bratti y Daniel Urrutia se apersonaran en las instalaciones del tren subterráneo. Sin embargo, en el lugar no encontraron personas detenidas, pero de igual manera se enviaron los antecedentes a la Fiscalía Oriente para que se iniciara una investigación.

Declaración

Lüer declaró como testigo ante la PDI el 30 de octubre del año pasado, luego de aquello, no quiso denunciar formalmente la situación ante la Fiscalía. En la declaración realizada, el joven señaló que “no vi al interior del lugar donde me agredieron sangre o personas heridas, mucho menos precintos plásticos como los que se utilizan para amarrar a las personas, enterándome solo días más tarde que dicho lugar correspondía a una de las entradas de la 60° Comisaría de Carabineros”.

De acuerdo a su relato, esa tarde se refugió en las escaleras de Baquedano que están en la esquina de Ramón Carnicer y Arturo Burhle. En dicho lugar -según su acusación- fue ingresado a la fuerza por Carabineros a un pasillo oscuro y fue golpeado por cuatro personas.

Además, denunció haber visto a dos personas maniatadas y escuchar estruendos y gritos que venían de la planta más baja. En el lugar, también describió haber visto funcionarios policiales que utilizaban cascos con las letras “FF.EE”, letras que iban acompañadas con números.

Posteriormente, habría sido lanzado al exterior por los propios carabineros, instancia en la que se encontró con un sujeto -identificado como David Muñoz– herido en una de sus piernas y que luego fue atendido por la Cruz Roja.

Investigación de la PDI

Según el medio citado, un informe de la Brigada de Derechos Humanos de la PDI no logró acreditar las acusaciones. El trabajo incluyó la toma de declaraciones a más de 20 personas, el análisis de las cámaras de seguridad del Metro y la comisaría de la estación y peritajes fotográficos.

Tras el estudio de estos antecedentes, en el informe se indicó que “no se logró establecer la veracidad de los hechos denunciados” y se añadió que “no se encontraron indicios criminalísticos para acreditar la efectividad del delito denunciado”.

De acuerdo a Lüer, los hechos ocurrieron a las 18:30 horas. Sin embargo, el informe de la PDI señaló que en la declaración entregada por David Muñoz, el joven indicó que recibió un disparo de escopeta por parte de personal de Carabineros proveniente del acceso subterráneo de la 60° Comisaría cerca de las 17:30 horas.

Posteriormente, indicó, fue atendido por voluntarios de la Cruz Roja y trasladado hasta la Posta Central. “Cuyo dato de atención de urgencia indica que el ingreso a ese centro asistencial se materializó a las 18:25 horas, lo que no es congruente con lo señalado por Nicolás Lüer (…) por cuanto con estos antecedentes el suscrito supone que los hechos denunciados ocurrieron cerca de las 17:30 horas y no las 18:30 horas como manifiesta la víctima”, se indicó en el informe.

Además, tras la revisión de cámaras se estableció que “se puede observar a personal de Carabineros que entra y sale en reiteradas oportunidades, algunos de los cuales lo hacen con traje de protección antiflamas y otros con uniforme interno, correspondiente a pantalón y camisa verde, además de chaleco antibalas y algunos con casco color verde, sin embargo, ninguno de los carabineros captados por las cámaras de seguridad usaba casco con las letras ‘FF.EE.’ y números”, como señaló Lüer.

En cuanto a los videos internos captados en la comisaría, se informó que “no se observa en dichas imágenes personas civiles aparentemente detenidas” y sobre las personas maniatadas, la PDI indicó que “no se encontraron indicios de interés criminal”.

Sobre los gritos denunciados por el joven, el informe estableció que no se pudo acreditar la situación debido a que las cámaras no tienen audio; mientras que por el estruendo, indicaron que podrían haber sido causado por un disparo con escopeta antidisturbios en el exterior.

El informe además indicó que “la denuncia hecha por Nicolás Lüer no ha sido posible ser establecida, ya que no hay registros documentales o de imágenes de videos donde conste que fue golpeado y que, al existir el dato de atención de urgencia, este no refiere descripción específica de lesiones”. Con respecto a las lesiones que se le constató, se indicó que el examen físico dio cuenta de tener la rodilla “sin derrame articular, sin deformidad y escasa contusión en el muslo distal”, junto con lesiones leves en una mano.

“Lo anterior no es conteste con lo que él refiere en su declaración, donde manifiesta haber recibido golpes en su espalda, nuca, estómago, rostro, además de su rodilla izquierda, que según su versión resultó lesionada”, se añadió.

Tras esto, la Fiscalía se apronta para poder cerrar el caso.