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Las Hijas de San Pablo, conocidas como Paulinas, dejarán la Arquidiócesis de Concepción después de casi 60 años de servicio para trasladarse a Santiago debido a la falta de nuevas vocaciones y su avanzada edad. La librería Paulinas seguirá operando en la región, ahora atendida por laicos, mientras las hermanas mayores permanecerán en la capital cuidando de ellas mismas. Solo la hermana María Teresa Gajardo quedaba en la región, encargada de la librería y apoyo espiritual a jóvenes. El arzobispo Sergio Perez de Arce agradeció su labor, y la superiora provincial Julieta Stoffel aseguró que, pese al retiro físico, el centro apostólico continuará ofreciendo servicios en la zona.

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Tras casi 60 años de servicio, la Congregación de las Hijas de San Pablo, más conocidas como Paulinas, dejarán la Arquidiócesis de Concepción para radicarse en Santiago. La librería seguirá funcionando, pero ellas por su edad y la falta de nuevas vocaciones, se quedarán en su casa de residencia en la capital, cuidando de las hermanas mayores.

Del último tiempo a la fecha, sólo quedaba en la región la hermana María Teresa Gajardo, quien con 43 años de vida consagrada, llevaba adelante la atención de la librería y ayuda espiritual a lo jóvenes.

El arzobispo de Concepción, Sergio Perez de Arce, lamentó que se vayan de la arquidiócesis, pero agradeció por todos los años de servicio.

Además, comentó que ante la preocupación de los que habitualmente acuden a la Librería Las Paulinas para comprar, libros, encíclicas, figuras religiosas y menajes, esta será atendida por laicos.

La superiora provincial de las Hijas de San Pablo, hermana Julieta Stoffel, enfatizó que si bien la congregación se retira físicamente de la arquidiócesis el centro apostólico continúa prestando sus servicios, en relación a la librería “Las Paulinas” ubicada en O’Higgins.