Nuevamente, apoderados de un establecimiento educacional llevan a la Justicia las clases remotas, como consecuencia de la crisis sanitaria que se registra desde marzo por el coronavirus.

Esta vez son 198 padres de 234 alumnos y alumnas del Colegio Adventista de Talcahuano, quienes denuncian, a partir de una carga horaria de clases y contenidos distintos a los que entrega la modalidad presencial, un incumplimiento del contrato por el servicio educacional.

El abogado Luis Felipe Andrades, se refirió a los argumentos del recurso de protección ingresado en la Corte de Apelaciones de Concepción.

Actualmente la colegiatura es de casi 75 mil pesos mensuales y lo que piden los padres y apoderados es que el tribunal de alzada determine que el establecimiento particular subvencionado rebaje en un 50% el arancel.

La vocera del grupo, Erika Arriagada, explicó que además de los problemas con el contrato de servicios, las familias han tenido que soportar un aumento de los gastos económicos en guías, tintas, impresoras y computadores.

La acción legal ya fue declarada admisible, solicitando la Corte de Apelaciones los descargos al Colegio Adventista del puerto, pero también informes sobre la denuncia a la Seremi de Educación y a la Superintendencia del ramo.