Ante el hallazgo de un cuerpo o restos óseos es obligación del Ministerio Público no sólo determinar la identidad sino también la causa de muerte, según confirmó un abogado penalista. Esto es algo que no se hizo en el caso del cadáver que correspondería a Sergio Mardoff Peirano, encontrado en 2015 camino a Santa Juana.

Tras 13 años desaparecido, el pasado viernes la familia de Mardoff Peirano anunció que habían identificado un cuerpo que, según su convicción, es el del joven. Las críticas de la familia no sólo tienen que ver con que sus restos permanecieran tres años en el Servicio Médico Legal (SML), sino con el tiempo que perdió la Fiscalía para esclarecer lo ocurrido a partir de su desaparición en 2005.

Al respecto, Andrés Cruz, abogado penalista y exfiscal, fue categórico en señalar que es obligación del Ministerio Público concentrarse tanto en la identificación de un cuerpo como en la investigación de las posibles causas de muerte.

Lo anterior, subrayó Cruz, sin importar si se trata de restos con una data reciente de muerte o, como en el caso de Sergio Mardoff Peirano, si falleció hace ya varios años, en una fecha coincidente con su desaparición.

Pero también es preocupación del padre, madre y hermanas de la víctima, así como sus abogados, la posibilidad de que si Sergio fue asesinado el delito pueda estar prescrito.

En ese sentido, el abogado Cruz precisó que hay distintas tesis sobre los plazos de prescripción.

Por lo tanto, si se llegara a determinar que Sergio Mardoff fue víctima por ejemplo de un homicidio, los eventuales responsables podrían enfrentar hasta presidio perpetuo y la prescripción iría entre los 10 y 15 años, contabilizada desde el asesinato o desde que el crimen quedó al descubierto.