El niño tenía tres años y fue amenazado con un cuchillo. El sujeto le pidió a la mujer que le dijera: "yo soy tu señor, bésame los pies". Al negarse, comenzaron los golpes. En la audiencia de formalización el imputado empezó a llorar y gritar. Pedía ayuda a su "papá" y a "diosito".
Un hombre agredió a una mujer en Punta Arenas y amenazó a su hijo con un cuchillo. Personal del GOPE tuvo que llegar hasta la vivienda porque el sujeto se encerró con el menor de tres años.
La situación se vivió en Villa Caupolicán el reciente viernes. Fue a eso de las 6:00 am que Carabineros fue alertado por una denuncia de violencia intrafamiliar.
Todo ocurrió cuando el atacante ingresó hasta la habitación de la víctima, quien estaba con su hijo. Ahí la obligó a decirle: “yo soy tu señor, bésame los pies”.
La mujer se negó, e inmediatamente fue agredida: la tomó del cuello, la golpeó y la zamarreó de forma descontrolada.
El ataque no terminó ahí. Después el hombre le quitó al pequeño y lo tomó en brazos, mientras lo amenazaba con un cuchillo cocinero todo el tiempo.
Los vecinos alertaron a Carabineros, quienes llegaron y solicitaron la presencia del Grupo de Operaciones Especiales (GOPE). A esa altura, el sujeto expulsó de la casa a la madre.
“Al ver la presencia policial, éste se encierra, por lo que se activa protocolo para la concurrencia de personal GOPE”, dijo el capitán Fernando Quiñiñir, de la Primera Comisaría de Carabineros a El Pingüino.
Lloró y gritó por su papá
Personal especializado logró salvar al niño y a su madre. Además, el hombre quedó detenido y puesto a disposición del Ministerio Público para pasar a control de detención por el Juzgado de Garantía de Punta Arenas.
Pero ocurrió una situación particular que hizo imposible formalizarlo. El imputado empezó a gritar y llorar en el tribunal. De hecho, pidió ayuda a su “papá” y a “diosito”.
Acusó que estaba sufriendo una descompensación mental. La defensa respaldó que su defendido tiene una condición mental diagnosticada.
El sujeto fue acusado de incurrir en los delitos de amenazas, lesiones menos graves, ambas en contexto de violencia intrafamiliar, y sustracción de un menor en desarrollo de tentativo.
