En julio de 2017, la PDI recibió una denuncia en la cual se acusó a un hombre de actuales 66 años, residente de Punta Arenas, de haber violado de manera reiterada a una niña, agresiones donde la menor también habría sido víctima de amenazas con un arma de fuego.

Los hechos habrían comenzado en 2013 cuando la niña -que es hija de su esposa- tenía 12 años y se habrían extendido hasta el mismo mes que la denuncia se concretó.

Según se detalló en una audiencia al respecto, todo habría partido al interior del domicilio que compartían un día que ambos se encontraban solos.

Ese mismo año, mientras la víctima estaba viendo televisión en el dormitorio matrimonial, el imputado la habría tomado con fuerza, tirado a la cama y tapado su boca para violarla, tras lo cual la habría amenazado que no contara nada.

De incumplir su petición, el sujeto, que arriesga 20 años de presidio de ser encontrado culpable, le habría dicho que dañaría a su madre.

En la misma instancia se indicó que la pareja contrajo matrimonio en octubre de 2016, tras lo cual las agresiones habrían continuado de manera frecuente con intimidación y el uso de armas y cuchillos, sumado a golpes.

Las violaciones también habrían tenido lugar en parques, según se acusó.

Por su parte, el hombre negó la veracidad de las acusaciones en su contra y aseguró que nunca tuvo problemas con la menor.

“A mis 66 años tengo mis principios y no realizaría algo así. Estaba destruido y no entendía esa denuncia”, señaló ante un tribunal.

“En la noche apareció la PDI, a quien le indiqué que tenía guardadas dos pistolas que son una herencia de mi padre, y están legalizadas. Me llevaron al cuartel y después me piden que declare, pero yo no entendía nada”, recordó el imputado.

“Al otro día me formalizaron y aún no sé porque estoy en esta situación. Esto me destruyó psíquica, física, emocional y económicamente. Nunca he estado preso”, englobó el adulto mayor.

Este artículo describe un proceso judicial en curso
Existe la posibilidad de que los cargos sean desestimados al finalizar la investigación, por lo cual NO se debe considerar al o los imputados como culpables hasta que la Justicia dicte sentencia en su contra.
(Artículo 04 del Código Procesal Penal)