Según acreditó el tribunal, en abril de 2022, José Queipul, atacó a su hijo con un azadón. En su propio domicilio se encontró el arma homicida que contenía restos biológicos. Las pruebas expuestas en el juicio determinaron que todo ocurrió en un "arrebato de violencia".

Una sentencia de presidio perpetuo dictó el Tribunal Oral de Angol, en contra de un comunero mapuche de Temucuicui en la comuna de Ercilla, tras declararlo culpable de asesinar a su hijo usando un azadón

La decisión de los jueces fue aplicada respecto de José Marcelino Queipul Nahuel, quien fue condenado por el delito de parricidio cometido el 27 de abril de 2022, al interior Temucuicui.

La evidencia presentada en el juicio, que incluyó testimonios y peritajes genéticos y forenses, permitió demostrar la culpabilidad de Queipul Nahuel, quien en un arrebato de violencia acabó con la vida de su propio hijo, José Jerónimo Queipul Levicura, tras golpearlo en la cabeza con un azadón, tal como detalló el fiscal, Carlos Bustos

En un comienzo, el ahora condenado negó su participación en los hechos, sin embargo, en su domicilio la policía encontró el arma homicida, la cual mantenía aún restos de material biológico, como sangre y pelos, que resultaron ser de la víctima, según fue corroborado por análisis de ADN.

Para determinar la pena, el tribunal consideró no solo la gravedad del delito, sino también las consecuencias que este tuvo, ya que se demostró que la víctima era el principal sustento económico de su madre.

La pena de presidio perpetuo simple implica cárcel de por vida para el condenado, quien recién podría empezar a postular a beneficios cuando lleve cumplidos 20 años de la sentencia.