La Democracia Cristiana aseguró que no ha conversado con la oposición, en el marco del acuerdo administrativo, y que agotarán las instancias de diálogo con el oficialismo y el Gobierno, para llegar a la mesa de la Cámara de Diputadas y Diputados. Por su parte, tras alinearse con la postura del Partido Comunista, desde el Frente Amplio indicaron que si la DC termina imponiéndose, debe entregar garantías de que el PC podrá presidir la Corporación en el siguiente turno.
Queda una semana para que la Cámara de Diputadas y Diputados vote la nueva presidencia de la Corporación y, en este momento, las fuerzas oficialistas corren con ventaja para retener el control de la Mesa.
Pero eso deberá ocurrir bajo ciertas condiciones. Dentro de las fuerzas negociadoras que apoyan al gobierno, hay un reconocimiento -en algunos casos a regañadientes- de que la Democracia Cristiana deberá presidir desde el próximo lunes, si quieren acumular los votos necesarios.
Esto va en contra de la pretensión del Partido Comunista, en el corazón de Apruebo Dignidad, de ser ellos quienes luego de ser vetados por la propia DC en octubre pasado, tengan su turno y presidan la Sala por 8 meses.
Hoy habrá una reunión presencial y también por zoom, entre todas las fuerzas de oficialismo, la DC y el Partido de la Gente (PDG).
Democracia Cristiana y Demócratas
El jefe de bancada DC, Eric Aedo, del que se rumorea fuertemente que tiene un interés personal en presidir la Cámara, dijo que no hablarán con la derecha hasta que las instancias de conversación con el oficialismo se agoten.
Asimismo, el diputado por la región del Bío Bío habla de ‘ánimo y madurez política’ para destrabar el diálogo.
Aedo menciona una idea que ha corrido con fuerza durante las últimas dos semanas: Sumar a Demócratas al apoyo del acuerdo administrativo oficialista.
Tras la caída de la acusación constitucional contra el ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, no pocos vieron el voto en contra de Demócratas y las negociaciones fructíferas del gobierno, como una señal de que podrían desechar el camino con el que están asociados: El de la oposición.
El diputado Miguel Ángel Calisto evitó dar luces del camino que tomarán y prefirió argumentar en favor del acuerdo administrativo más transversal posible, como lo hizo el Senado.
La situación en el oficialismo para presidir la Cámara de Diputados
El Frente Amplio sorprendió apoyando al Partido Comunista. Hasta ese momento, ninguna fuerza externa se la había jugado por apoyar públicamente ni a la DC ni al PC.
Por su parte, desde el Socialismo Democrático ven una postura ‘cómoda’ del FA, en donde no serán ellos los que tendrán que decirle a los diputados comunistas que no pueden presidir esta vez.
Jaime Sáez, diputado de Revolución Democrática, defiende que la postura del bloque que integra es la de hacer cumplir ‘al pie de la letra’ el acuerdo original.
Sáez dice que si la Democracia Cristiana preside por esta pasada -abriéndose a esa posibilidad- le deben dar garantía ‘absoluta’ al Partido Comunista, que después vendrán ellos.
Las fuerzas del Socialismo Democrático piden ser pragmáticos, al igual que lo hace el gobierno. Entienden que lo de comunistas y demócratacristianos debe resolverse entre ambas partes, pero también llaman a que nadie sea obstáculo para ejercer la estrecha mayoría que tienen.
Daniel Manouchehri, jefe de bancada del Partido Socialista, indicó que su rol es el de preservar la unidad y construir mayorías, incorporando fuerzas que no forman parte del gobierno, en lo que podría ser otro guiño al Centro Democrático Unido.
La postura de la oposición
La oposición atraviesa por un momento difícil. Pese a que el gobierno está sumido en una crisis por el Caso Fundaciones, Chile Vamos enfrenta un nuevo problema tras la acusación al ministro Ávila y los votos con que la UDI, RN y Evópoli no actuaron en conjunto.
Eso los ha debilitado. Además, se encontraron con el problema de que un acuerdo de oposición podría llegar a tener los votos sólo si sus principales partidos ceden ante grupos más pequeños.
Frank Sauerbaum, jefe de bancada de Renovación Nacional, dice que hay que ser ‘generosos’ y que la oposición debe quitarle la mesa al gobierno.
Aún hay varios flancos abiertos, pero si el oficialismo logra destrabar el dilema ‘DC-PC’, podría estar la llave para mantener los 78 votos que logró para elegir como vicepresidente a Cristian Tapia y derribar la acusación contra el ministro Ávila.
En tanto, el Partido Comunista tiene mucho que decir en esto. Si llegan a ceder, no será gratis para el resto de las fuerzas y defenderán lo que entienden es su legítimo derecho de llegar a la mesa de la Cámara de Diputadas y Diputados.
