El presidente Boric abogó por una nueva Convención con plazos acotados y con el apoyo de una comisión de expertos, para un nuevo proceso constituyente. "Hay cosas que deben ser evidentes", sentenció el mandatario. "Creo que no tiene que abordar cada una de las demandas identitarias que existen en la sociedad", sentenció.

El presidente Gabriel Boric aseguró que un nuevo proceso constituyente debería tener plazos más acotados y un comité de expertos.

Así lo aseguró durante el foro “The New Chilean Politics and its Regional Implications”, del programa de Líderes Mundiales, en la Universidad de Columbia.

En la oportunidad, el mandatario fue consultado sobre los mecanismos para una nueva Constitución tras el triunfo del Rechazo.

Recordemos que los partidos políticos aún están negociando un mecanismo que permita dar continuidad al proceso constituyente, en medio de tensiones con el Gobierno.

Boric y nuevo proceso constituyente: Nueva Convención “con bordes y plazos claros”

Al respecto, Boric mostró cautela asegurando que “es una pregunta muy sensible, porque en este momento se están produciendo las negociaciones en el Congreso para poder decidir cómo seguir”.

Y si bien reconoció que “el Gobierno tiene una opinión respecto de como hay que seguir”, sostuvo que “también entendemos que nuestro principal rol hoy día es facilitar ese acuerdo y gobernar”.

Asimismo, pese a enfatizar que La Moneda “no pretende pautear al Congreso respecto al contenido de ese acuerdo”, añadió que “sí hay cosas que deben ser evidentes”.

“El pueblo chileno se pronunció mayoritariamente el 25 de octubre de 2020 por una nueva Constitución, escrita por un órgano 100% electo para ese fin. Por lo tanto, la idea de que una nueva Constitución se pueda llegar solamente entre un acuerdo de los partidos o expertos designados no respondería al mandato que el pueblo de Chile estableció”, sentenció Boric.

A reglón seguido, apuntó a una nueva Convención “con bordes y plazos claros”, además de un comité de expertos.

“Espero que tengamos una nueva Convención con bordes más claros; plazos quizá más acotados, tomando en cuenta la experiencia anterior; y apoyo de un comité de expertos o gente que contribuya a hacer la discusión más fácil y digerible para todo”, dijo.

“Espero que tengamos una Constitución que sea un punto de encuentro y no un eje divisorio que nos siga conflictuando por muchas décadas más”, añadió.

Por último, apuntó a una Constitución “más general, creo que no tiene que abordar cada una de las demandas identitarias que existen en la sociedad”.