En una resolución de nueve páginas, el pleno de la Corte de Apelaciones de Santiago se refirió a una polémica que tuvo cabida a nivel nacional: la modernización en las notarías.

Esta vez, el tribunal de alzada capitalino le rayó la cancha a notarios de su jurisdicción respecto a los trámites. Aunque estos pueden recurrir a la Corte Suprema ya anunciaron que no lo harán.

Lo anterior a raíz de los hechos ocurridos en la notaria Valeria Ronchera, luego que esta implementara un sistema de reconocimiento facial para la realización de trámites, lo que abrió un gran debate y generó la petición del pronunciamiento legal.

En el texto los ministros se pronunciaron sobre el uso de la firma electrónica, la autorización de escrituras públicas, el uso de medios telemáticos para la autorización de firmas estampadas en instrumento privado o de plataformas tecnológicas para la verificación de identidad, letras de cambio o pagarés y a la función territorial de los notarios.

Pero uno de los puntos esenciales fue que la Corte zanjó que la firma de escrituras públicas solo se podrá realizar de forma presencial.

Alfredo Martín, vicepresidente de la Asociación de Notarios y Conservadores de Chile, afirmó que las escrituras públicas deben suscribirse de manera presencial, ya que esto último, a su juicio, es extremadamente necesario.

Por su parte, Jorge Bofill, que representa a la notaría Valeria Ronchera, pioneras en modernización, afirmó estar conforme con la resolución.

Respecto a las escrituras públicas, el abogado sostuvo que el problema ahora queda en manos del Congreso.

“Para la Notaría Ronchera esta resolución es una muy buena noticia porque la Corte descartó aplicar sanción alguna y permitió a todos los notarios, incluida ella, a autorizar sus sistemas para autorizar documentos privados, lo que le permitirá regresar a su funcionamiento normal”, dijo.

“En cuanto a las escrituras públicas, la Corte reafirmó sus pronunciamientos anteriores, sosteniendo que la ley no permite otra cosa que su firma presencial. El problema en discusión, por lo tanto, está en manos de legisladores”, agregó.