El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, presenta testimonio este jueves ante diputados sobre un contrato adjudicado a una organización que remuneró a familiares del mandatario, caso que ha generado un escándalo ético y político.

Trudeau, que está siendo investigado por el Comisario de ética sobre su papel en ese aparente conflicto de interés, se presenta durante una hora esta tarde para ser escuchado por la Comisión de Finanzas de la Cámara de los Comunes.

Se trata de un hecho excepcional para un jefe de gobierno en Canadá.

“Todo este escándalo apesta a corrupción en los más altos niveles de gobierno”, denunció el jueves el jefe saliente de la oposición conservadora Andrew Scheer durante una conferencia de prensa.

“Nuestro mensaje importante hoy es que este no es final de la historia”, agregó.

La semana pasada los dos principales partidos opositores pidieron la renuncia de Trudeau, quien encabeza un gobierno minoritario.

El líder canadiense se disculpó el 13 de julio y admitió haber cometido un “error” al participar en discusiones sobre la asignación de un contrato gubernamental a la organización de caridad We Charity.

Ese contrato fue otorgado sin un pedido de ofertas y habilita a gestionar un programa de becas estudiantiles de unos 660 millones de dólares estadounidenses.

El programa fue luego retirado pero la polémica se mantuvo. We Charity habría recibido unos 40 millones de dólares, según medios de prensa.

La entidad admitió haber entregado unos 300.000 dólares a la madre y al hermano del primer ministro por pronunciar discursos y participar en eventos.

La esposa de Trudeau, a su vez, habría recibido 1.500 dolares por asistir a un evento en 2012, antes de que su marido se convirtiese en líder del partido liberal.

El escándalo ha dañado la imagen de Trudeau y de su partido en los sondeos, aunque los liberales mantienen de todos modos la delantera en intención de voto, según una encuesta publicada este jueves.