En septiembre pasado, Vladimir Putin llamó a miles de ciudadanos rusos a ser parte de la guerra contra Ucrania, en su calidad de reservistas. Muchos huyeron del país, otros buscaron en Google "cómo romperse el brazo", pero un trabajador del área de informática prefirió irse a vivir al bosque, con todo lo necesario, incluso Internet para trabajar.
Un hombre ruso lleva casi un mes viviendo en el bosque, con el fin de evitar ser reclutado y evadir las multas o castigos por no alistarse ante el ejército, en medio de la guerra con Ucrania.
Durante todo el proceso, Adam Kalinin (su nombre falso) ha contado con el apoyo de su esposa, dice que tiene todo lo necesario para sobrevivir, e incluso, continúa trabajando desde su computador, instalado en una carpa.
Vale mencionar que a principios de este mes, Rusia afirmó que más de 200.000 ciudadanos fueron incorporados a las filas en el marco de la movilización de reservistas por parte de Vladímir Putin.
Ciudadano ruso vive escondido en el bosque para no ir a la guerra
No son pocos los ciudadanos rusos que tomaron medidas desesperadas con el fin de no enlistarse en su calidad de reservistas en la actual guerra que libra su país contra Ucrania.
Mientras muchos salieron de Rusia, otros buscaban en Google “cómo romperse el brazo”. Pero lo de Adam Kalinin es inédito.
El experto en informática ha estado viviendo en un bosque en el sur del país durante casi un mes. Se mudó a su nuevo “hogar” después de oponerse a la convocatoria al conflicto bélico y recibir una multa, junto a la orden de varios días de arresto, según ZonaMedia.
Quizás lo más llamativo de esta historia, es que Kalinin continúa realizando su trabajo como informático, desde su carpa en el medio del bosque. Según explicó, tiene una tienda de campaña para dormir y otra para trabajar, ambas, instaladas en lugares estratégicos según el sol, sombra, viento, etc.
Sus vivencias en Telegram
Según el relato de Adam Kalinin, en el bosque, por ahora, tiene todo lo que necesita; todo su equipamiento informático, botiquines de primeros auxilios, ropa abrigada, y mucha comida enlatada.
Por medio de su cuenta de Telegram, el desertor del ejército ruso comenta sus vivencias. En la red social hace especial mención a su esposa, quien lo ha apoyado en todo este proceso.
Consultado ante la inminente llegada del invierno, que en Rusia cuenta con mala fama debido a su inclemencia, el hombre dice no tener aún un plan.
“Cuando me mudé aquí, pensé, bueno, me quedaré en algún lugar durante un mes, y allí, probablemente, esta movilización terminará o se nos ocurrirá algo. (…) El mes está llegando a su fin. En general, es posible que siga aquí”, concluyó.
¿Cómo es vivir en el bosque?
Sobre su experiencia, el hombre que escapó a un bosque con tal de no asistir a la guerra entre Rusia y Ucrania, dice que a pesar de ser difícil, es mejor que la viven los que fueron llamados al ejército.
Se levanta todos los días a primera hora, “con el cantar de los pájaros”, trabaja, se limpia con toallas húmedas y cocina lo que puede.
Dice que no solo tiene conocimientos básicos de acampar, pero que con la ayuda de YouTube, mira tutoriales para construir elementos útiles en su pequeño campamento.
