Un grupo de portavoces del movimiento de los “chalecos amarillos”, que llamaron el domingo a encontrar una salida a la ola de protestas en Francia, declinaron reunirse con el gobierno por “motivos de seguridad”, anunció este lunes uno de sus miembros a la AFP.

El Ejecutivo francés había anunciado que recibiría el martes a miembros moderados del movimiento, autodenominados “chalecos amarillos libres”.

LO anterior, para intentar apaciguar la situación después de tres semanas de protestas que nacieron contra el alza del precio de los carburantes.

“Ningún miembro de los chalecos amarillos libres irá mañana a Matignon”, sede de la oficina del primer ministro, Édouard Philippe, dijo a la agencia France-Presse (AFP) Benjamin Cauchy, uno de los integrantes del movimiento que el domingo firmó una columna a favor del diálogo.

Otra de sus voceras, Jacline Mouraud, también dijo a la AFP que no iría al encuentro porque recibió “demasiadas amenazas” tras la publicación de la columna de opinión.

En el escrito, marcaron distancia con otros miembros del movimiento que participaron en los actos violentos del sábado.