El presidente estadounidense, Donald Trump, prometió un lanzamiento de campaña “salvaje” este martes en Florida, desde donde comenzará su camino en busca de la reelección en 2020 a pesar de que las primeras encuestas muestran que el exitoso hombre de negocios republicano también es vulnerable.

Los organizadores afirman que las entradas para el mitin en un anfiteatro con capacidad para 20.000 personas están agotadas y que muchos partidarios se agolparán fuera del recinto para verlo a través de pantallas gigantes.

“¡Vean lo que está pasando en Orlando, Florida, ahora mismo! La gente nunca ha visto nada igual (a menos que toques una guitarra). Va a ser salvaje. ¡Los veo luego!”, tuiteó el mandatario.

Después de más de dos años en la Casa Blanca llenos de dramas y de intrigas, este hombre de negocios de verbo fácil apuesta a que la economía pujante y su promesa de luchar por la olvidada clase trabajadora estadounidense van a lograr persuadir al electorado de que merece un segundo mandato de cuatro años.

Pero ya hay más de 20 demócratas compitiendo por la nominación y la larga investigación sobre si había vínculos entre su equipo y Rusia, y su estilo divisivo y lacerante han perjudicado su imagen de presidente poco convencional.

Varias encuestas muestran que Trump queda muy relegado si se enfrentara a Joe Biden, el favorito para hacerse con la nominación demócrata, que tiene como mensaje devolver a Estados Unidos a los tiempos menos agitados cuando Barack Obama dirigía el país y él era su vicepresidente.

Pero no sólo un político consolidado como Biden tiene la ventaja. Incluso Pete Buttigieg, un alcalde homosexual de una pequeña localidad del centro del país, que irrumpió como una sorpresa en el campo demócrata, se impondría a Trump por un estrecho margen, según una encuesta publicada por la cadena conservadora Fox News este fin de semana.

Pero, las encuestas tan lejanas a la fecha de las elecciones tienen poco valor y en 2016 los sondeos fallaron a la hora de predecir que Trump iba a vencer a la candidata demócrata Hillary Clinton.

Ante este panorama, Trump ha denunciado la “falsedad” de las encuestas y medios estadounidenses informaron que despidió a varios de los encuestadores que trabajaban en su campaña.