El presidente Nicolás Maduro responsabilizó a “terroristas” por el nuevo apagón que paraliza a las principales ciudades de Venezuela y extendió hasta el miércoles el feriado nacional.

Cuando apenas se recuperaba de la peor falla eléctrica de su historia, ocurrida el 7 de marzo y que duró casi una semana, el país petrolero volvió a quedar a oscuras a partir del lunes: calles desoladas y comercios cerrados.

No hay ninguna explicación sensata, creíble (…), ya no es un ciberataque o un pulso electromagnético, ahora es un sabotaje
- Juan Guaidó

“Es una verdadera desgracia, una crisis humanitaria, aquí se trabaja con las uñas”, se quejó el dueño de una panadería.

Además de la capital, el corte afecta a 21 de los 23 estados, según reportes de usuarios en redes sociales. El gobierno no suele dar informes del impacto de este tipo de emergencias.

La falla comenzó el lunes a las 13:22 horas locales y colapsó el suministro de agua, las redes de telefonía e Internet, además de la banca electrónica, vital ante la falta de efectivo que genera la voraz hiperinflación.

El gobierno de Maduro extendió por 24 horas más (hasta el miércoles) la suspensión de actividades laborales y educativas.

“Terroristas”

Los apagones son frecuentes en el país petrolero, y sistemáticamente el gobierno los atribuye a sabotajes de la oposición y Estados Unidos.

Maduro denunció que un “incendio de gran magnitud” provocado por “terroristas” amparados por Estados Unidos, prolonga el apagón.

Según un comunicado que el mandatario socialista difundió en Twitter, “el sistema eléctrico nacional sufrió dos arteros ataques terroristas de manos de violentos”.

El primero, sostiene Maduro, ocurrió el lunes en el área de generación y transmisión de la hidroeléctrica de Guri, en el estado Bolívar, que provee de energía a 80% de Venezuela.

El segundo se habría registrado este martes, cuando los trabajos de recuperación habían alcanzado “los más altos niveles de generación” desde el 7 de marzo.

En un discurso en el Parlamento de mayoría opositora, el jefe legislativo, Juan Guaidó, desestimó la versión oficial.

Federico Parra | Agence France-Presse
Federico Parra | Agence France-Presse

“No hay ninguna explicación sensata, creíble (…), ya no es un ciberataque o un pulso electromagnético, ahora es un sabotaje, cuando ellos tienen militarizadas cada una de las instalaciones eléctricas”, expresó el opositor.

Impacto del apagón

El apagón es un nuevo golpe a la colapsada economía venezolana. Según estimaciones del parlamento opositor y organizaciones gremiales, el corte que del 7 al 14 de marzo había paralizado a país y sus puertos de exportación de crudo, provocó pérdidas de mil millones de dólares.

Tras esa crisis, Maduro anunció una reestructuración de su gabinete y prometió una “transformación profunda” de las empresas del sector, además de blindar la infraestructura con la Fuerza Armada. Más de una semana después, no se producen los cambios ministeriales.

Temor y caos

El masivo apagón de una semana, de hace 20 días, afectó con dureza a los hospitales, ya castigados por la falta de insumos y medicinas. Según organizaciones, una decena de pacientes murieron a raíz de los cortes.

“Si no vuelve la luz, tenemos el problema de que no nos dializan“, se lamentó Nelson Rosales (80) en un hospital de Caracas donde se vivían escenas de dramatismo.

“Suponte tú que la luz llegue el jueves, ¿qué pasa si llega el jueves? Nos habremos muerto todos“, advirtió el paciente en diálisis hace 10 años.

“Como siempre un sabotaje de estos desgraciados escuálidos, gracias al presidente de los escuálidos, Guaidó”, dijo una mujer en la calle.

El ambiente era tenso en la capital venezolana.

Diputados y periodistas fueron agredidos por partidarios del chavismo en las afueras del Parlamento venezolano, tras una sesión presidida por Guaidó, según congresistas y organizaciones de prensa.

Pacientes de tratamientos de diálisis fuera de una clínica cerrada | Federico Parra | Agence France-Presse
Pacientes de tratamientos de diálisis fuera de una clínica cerrada | Federico Parra | Agence France-Presse

“De manera sorpresiva, nuevamente, los colectivos violentos han rodeado el Palacio Legislativo, agrediendo a periodistas y diputados en presencia de la Guardia Nacional”, dijo el diputado Simón Calzadilla, refiriéndose a grupos civiles que la oposición denuncia que han sido armados por el gobierno.

Los incidentes se produjeron luego de una sesión en la que Guaidó rechazó la llegada de militares de Rusia al país el pasado fin de semana, alegando que viola la Constitución.

Sanciones

Guaidó prepara una movilización nacional hacia el palacio presidencial de Miraflores en Caracas para asumir su control, en fecha por definir, y no descarta pedir al Legislativo que autorice una intervención militar extranjera.

Washington, su más ferviente aliado, tampoco excluye una acción militar para sacar a Maduro, a quien se ha propuesto estrangular económicamente con sanciones como un embargo petrolero que se hará efectivo el próximo 28 de abril.

En medio de la presión internacional para que Maduro abandone el poder, Rusia y China, principales acreedores de la deuda externa de Venezuela (estimada en US$150.000 millones), se han convertido en los grandes aliados del presidente caribeño.

El sábado, dos aviones de las Fuerzas Armadas rusas aterrizaron en el aeropuerto que sirve a Caracas transportando personal militar y equipos, confirmó la agencia estatal rusa Sputnik, desatando un cruce de acusaciones entre Washington y Moscú sobre injerencia en la crisis venezolana.