El podcast “Reyes del drama”, dedicado a las series, el cine y las clásicas teleseries de TVN y Canal 13, tras 10 episodios decidió realizar su primera transmisión en vivo por Instagram y el invitado fue Alejandro Montes, el actor tras el “primo Cristián” de “Aquelarre”.
Durante más de una hora y media, el actor hizo un repaso de su carrera, donde reveló por qué apareció con un ojo irritado durante unos capítulos de la teleserie que actualmente está emitiendo TVN por segunda vez.
Al repasar su participación en la teleserie “Santo ladrón” (2000), Alejandro recordó un complejo momento que lo dejó sorprendido al observar la actitud que tuvo una de las actrices del elenco con un grupo de fans escolares que llegaban a las grabaciones que realizaban en Caleta Tumbes. “Quedé muy en shock cuando una actriz, ya mayor, los subió y los bajó. Les dijo: “cabros de las reconcha… váyanse a estudiar en vez de estar acá hueveando”, desclasificó.
“Nunca se me ha olvidado porque yo internamente decía: cómo es posible que esta actriz que lleva años trabajando con buenos personajes gracias a la gente tenga esa actitud”, declaró.
Además recordó que muchos de sus colegas lo criticaban en esa época porque me daba el tiempo de saludar a toda la gente que llegaba a verlo. “El trabajo que hacemos es para la gente, no se puede tener dos caretas. Cada vez que veo a esa actriz se me viene esa imagen”, señala.
“No ha sido una teleserie muy mencionada por el público a pesar de que tuvo mucho éxito en rating”, señaló sobre “Santo ladrón”, teleserie protagonizada por Sigrid Alegría y Alvaro Rudolphy, que no ha sido emitida nuevamente por TVN.
En esta producción compartió también con Catalina Pulido, con quien señaló haber tenido una relación cordial, pero no cercana a diferencia de su gran amiga Lucy Salgado. “Con la Lucy nos íbamos a carretear después de las grabaciones”, señala.
“Es irrisorio lo que pasa con el primo Cristián”
Sobre su participación en “Aquelarre”, Montes recuerda que al principio le costó enganchar con la actriz Yuyuniz Navas, pero luego fueron teniendo más feeling en las grabaciones. Confesó que tenía “muy buena onda” con Carolina Contreras y Claudia Vergara, quienes representaban a Alelí e Isidora.
“Tengo muy buenos recuerdos de ese grupo de jóvenes, con Paty López también. Fuimos un grupo humano muy entretenido y eso se logra transmitir a la gente. Después de 21 años aún me dicen primo Cristian y ya parezco el abuelo del personaje. Yo al principio de mi carrera quería puro sacármelo de encima”, confiesa.
Además señala que todavía recibe cartas de amor dirigidas al primo Cristián. “Es irrisorio lo que pasa. Muchas cartas de chicos gay que gracias al primo Cristian descubrieron que era gay. Lo encuentro casi surrealista”, explica.
La verdad tras el ojo rojo en un capítulo
Una de las preguntas que llegó del público durante la transmisión aludía a por qué Alejandro apareció con un ojo sumamente irritado en uno de los capítulos. Alejandro respondió: “Grabando ‘Aquelarre’, fui a un carrete donde tuve un pequeño altercado con una persona, ni siquiera recuerdo el motivo. Se acercó y me sacó la mugre”.
“Me pegó de la nada. Fue casi un asalto, en medio de una fiesta. Me dejó la cara muy deforme, tuve que ir al médico. En la teleserie dejé de aparecer un poco, o en las escenas aparezco de lejos o de espalda para que no se note tanto y se usó harto maquillaje. Tenía la cara muy deforme. Se supone que no debía grabar pero yo iba igual porque era mi primera teleserie”, explicó.
“Me angustié mucho, era mi primer trabajo y qué iban a pensar que estaba carreteando y llego hecho bolsa a las grabaciones. Por eso iba igual, a pesar de todo”, recuerda.
Además, el actor reconoció que aún mantiene mucho contacto con dos actores de la teleserie: Claudia Vergara (Isidora) e Iñigo Urrutia (Marcelo Alfonso).
Durante la entrevista, Montes también tuvo espacio para hablar dos de sus ex colegas que se han visto envueltas en polémicas últimamente más que en trabajos actorales: Catalina Pulido y Yuyuniz Navas, quienes se han referido en duros términos al feminismo y diversidad sexual.
“Nunca se puede salir desmereciendo o agrediendo a una minoría o a personas que solo quieren ser felices. Son seres humanos como cualquier otro. El respeto hacia el ser humano es lo más importante que debemos tener y no hay que perderlo”, señaló finalmente.
