Canal 13 respondió a la sanción impuesta por el Consejo Nacional de Televisión (CNTV) por una rutina de Yerko Puchento en la que, de acuerdo al ente regulador, se “mofa y menosprecia” la imagen de la Virgen María.
Recordemos que el miércoles la Corte de Apelaciones de Santiago confirmó que Canal 13 deberá pagar una multa de 200 UTM (más de 9 millones y medio de pesos) por la rutina del personaje de Daniel Alcaíno.
En detalle, el monólogo del comediante se realizó en el capítulo del 17 de mayo de 2018, en el que simuló su propio funeral. En esa oportunidad, Alcaíno se refirió al símbolo católico como “Inmaculiada Concepción” en más de una vez.
Tras conocerse la sanción, la estación televisiva dio a conocer un comunicado en el que defiende su “derecho a hacer humor, especialmente de corte político y en horario de adultos”.
“La libertad de expresión, la libertad editorial y la sátira política como género, no requieren que me detenga en hacer su defensa, pero sin ellas la democracia se ve debilitada y todos perdemos”, señala el escrito, firmado por Javier I. Urrutia, Director Ejecutivo Canal 13.
“Mientras nuestro país madura en aspectos cívicos, muchos quienes se autoproclaman progresistas y aparentemente abogan por libertades, operan desde la intolerancia cuando las opiniones, incluso las que son manifestadas en un evidente aimus iocandi, no los satisfacen imponiendo multas que buscan inhibir el ejercicio legítimo de la libertad de expresión, incluso el humor”, agrega.
Junto con señalar que la estación televisiva ha sido siempre respetuosa de la legislación vigente y del regulador de la actividad, Canal 13 indicó al mismo tiempo estar comprometido con la defensa “del derecho a decidir qué ponemos en nuestra pantalla y de quién y cómo nos reímos, dejando que sea el público quien decida qué ve y qué no ve”.
“Nos preocupa de sobre manera que el CNTV, excediendo sus atribuciones legales y vía un ejercicio sancionatorio excesivo y destemplado, intente imponernos su puntual criterio de lo que es un humor correcto y lo que no; y pretenda defender sensibilidades particulares transformándose en los hechos en el catón del buen gusto y lo correcto”, puntualizó el canal.
“La sanción en cuestión, y la ratificación por la Corte de Apelaciones, no hablan del mal gusto o vulgaridad del humorista, hablan de la intolerancia como sociedad esgrimiendo para justificarla la afectación a la libertad de culto”, asevera Urrutia.
Para leer el comunicado completo, puedes ingresar en este enlace.
