Según Patty Kihm y Aaron Hartline, encargados de la animación, "tener que lidiar con un panda gigante con mucho pelaje, mucha grasa y tener que interactuar con eso" fue lo más difícil del trabajo. "Además, (al estudio) no les gusta que retoques mucho el pelaje", agrega él. Turning Red ya está disponible en Disney+.

Ya está disponible en Disney+ Turning Red, la más reciente producción animada de Pixar, una que promete conquistar a públicos de todas las edades.

A diferencia de otras producciones de este estudio, Turning Red cuenta con un fuerte componente feminista en su historia, le hace un marcado guiño a la diversidad y rompe esquemas que el mismo estudio había seguido hasta el momento.

La trama gira en torno a Mei, una adolescente de ascendencia china que vive en Canadá en la década de 1990 junto a sus padres, quienes tienen un restaurant de comida tradicional.

La historia desarrolla cómo evoluciona la relación entre madre e hija, las diferencias que comienzan a aparecer entre ellas y el camino para que la madre admita que su retoño crece y cambia junto a este proceso.

Pero esta también incorpora un elemento clave en la trama: un secreto familiar queda al descubierto cuando Mei se da cuenta que cuando no puede controlar sus emociones se transforma en un panda rojo, animales con los cuales su familia ha tenido por décadas una relación especial.

En el elenco destacan Rosalie Chiang (Mei), Sandra Oh (madre – Killing Eve) y Maitreyi Ramakrishnan (Priya, amiga de Mei – Never have I ever).

La película fue dirigida por Domee Shi (Bao, Purl) y producida por Lindsey Collins (Buscando a Dory, WALL-E).

BioBioChile conversó con Patty Kihm y Aaron Hartline, encargados de la animación, y acá puedes leer la entrevista.

– Qué fue lo más fácil y lo más difícil de trabajar en Turning Red?

Aaron: ¿Lo más fácil? Tener una directora tan buena y que todo esté en la pantalla, seguir eso y solo agregar lo tuyo.

¿Lo difícil? Tener que lidiar con un panda gigante con mucho pelaje, mucha grasa y tener que interactuar con eso (Patty concuerda con la respuesta).

Además no les gusta que retoques mucho el pelaje porque hay mucha interacción corporal. Y sobre todo cuando tienes adolescentes, que ponen sus brazos en sí mismas, se tocan el pelo y hacen otros movimientos… el panda fue lo más difícil.

Patty: Cuando empecé a trabajar en la película alguien me preguntó que qué creía que iba a ser lo más difícil y dije el panda, imposible. Y llegó la pandemia.

Al final nos enviaron a la casa un día de marzo, no recuerdo la fecha exacta, pero parecía un saqueo afuera de Pixar.

Pero casi todos estábamos conectados desde casa como a la semana, listos, así que no perdimos mucho tiempo. Eso sí, tuvimos que encontrar una nueva forma de trabajo.

Fue muy colaborativo y creo que mucho de eso fue porque podíamos estar en el computador y ver a la gente compartiendo lo que hacía.

Aaron: Nos acercó en un tiempo aterrador, pero estábamos juntos e invitados a las casas del equipo, viendo a sus familias, mascotas. Juntos aunque extrañamente separados.

– Las boy bands son importantes en esta película. Aaron: ¿fuiste fan de alguna cuando joven?

Aaron: Sabes, ahora lo soy.

Cuando fui joven estaba interesado en el grunge y todo lo de Seattle, así que no pensé mucho en bandas de jóvenes.

Pero ahora que tuve que investigar mucho y ver videos… son divertidas, me gustan.

Y hablo de N’Sync, Backstreet Boys. Hemos visto mucho BTS, son muy buenos.

Si ves, en N’Sync siempre hay uno o dos que parecen no ir al mismo tiempo que el resto, puedes ver que están teniendo problemas. Pero BTS parece una máquina, una sola línea.

– ¿Qué películas los inspiraron para seguir una carrera en la animación?

Aaron: Dibujaba mucho de niño y muchos de mis momentos favoritos eran ir al cine con mi mamá. A veces entrábamos al cine, pero pasábamos a otra película y de repente terminábamos viendo tres películas.

Así que algunos de mis momentos favoritos de la infancia son de películas, como ET, y la crucial: Toy Story. Era fan de Star Wars y Jurassic Park, pero cuando vi Toy Story dije… “¿qué es esto?”

Patty: Toy Story fue importante para mí, pero un poco antes de eso Creature Comforts, de Aardman Animations, que también hizo Wallace and Gromit.

Básicamente Creature Comforts es un corto, pero fueron a un hogar de ancianos, entrevistaron a las personas del hogar y crearon personajes. Entonces uno está en el zoológico y es un león que dice lo que gusta hacer.

Para mí eso fue el primer llamado a la animación y después vi Toy Story. Ahí dije “ya, tengo que hacer esto”.

– ¿Qué creen que le gustará más a la gente de Turning Red?

Patty: Ver a una adolescente pasar por este cambio gigante en la pantalla, con un cuerpo y emociones nuevas, algo muy raro y aterrador, pero al final todo sale bien.

Además, las relaciones con su grupo de amigas, que se apoyan y harían cualquier cosa por la otra.

Junto con eso la familia que tiene, a la que ama. Su madre aparece bastante en la película, apreciar esas relaciones porque enriquece su vida.

Espero que el público se de cuenta de eso y abrace a sus amistades.