La noche del 31 de marzo de 1995 quedó marcada para siempre en la cultura popular, cuando la cantante de cumbia, rancheras y tex-mex, Selena Quintanilla, fue asesinada por la presidenta de su club de fans luego de una discusión en un hotel de Texas.

Selena se convirtió en la primera mitad de la década de los 90’ en una de las artistas latinas más populares del mundo, era la segunda en venta de álbumes -detrás de Gloria Stefan- abrió una franquicia de tiendas de ropa y preparaba para julio de ese año su primer disco en inglés.

Su popularidad se centró en el sur de Estados Unidos en zonas como Texas, Alabama, California, Arizona o Florida, Puerto Rico, Centroamérica y especialmente México, donde era una ídola pese a su corta edad y tras su asesinato ha sido adorada casi a niveles de leyenda o como una figura de divinidad.

Desde su asesinato, ha vendido más de 65 millones de copias, siendo una de las artistas hispanas más exitosas, sólo por detrás de Shakira, Gloria Estefan y Jennifer López. Además es la única que ha logrado meter cinco álbumes en la lista Billboard 200, consigna diario El País de España.

La figura de Selena pasó de la fama al mito, ganando una figura de cera en el muso de Madame Tussauds en California. En 2017 se le otorgó una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood, en una ceremonia donde acudieron 4500 personas.

Además y especialmente en México y el sur de EEUU, su figura también ha sido llevada a la divinidad, incluso en Texas hay un memorial en su honor, llamado Mirador de la Flor, que contiene una placa y una estatua de la fallecida artista.

También se construyó un museo en honor a su memoria en Texas, donde cada año miles de visitantes acuden para mirar recuerdos de la artista, con discos, pertenencias personales o vestimentas que utilizó durante sus masivos espectáculos.

Incluso en la casa donde vivía antes de morir, junto a la de sus padres, hay un mural construido por fans de la artista con una de sus frases: “El objetivo no es vivir por siempre sino crear algo que lo sea”.

Artistas como Gaby Zamora o Mon Laferte le han hecho tributos o dedicado canciones y Selena Gómez fue bautizada así, debido al fanatismo de sus padres por la malograda artista.

Carrera

La carrera de Selena inició cuando sólo tenía seis años, de familia con ascendencia latina, aunque sus padres eran estadounidenses, la pequeña partió cantando en agrupaciones junto a dos de sus hermanos, en los 80’ comenzó a incursionar como cantante de música texana participando en festivales y programas de televisión, aunque sufrió el rechazo de un ambiente particularmente machista y más en aquellos años.

“La música tejana fue muy difícil para nosotros porque yo era mujer. Mi papá tenía muchos problemas tratando de coordinar shows para nosotros porque habían muchos hombres que pensaban que las mujeres no podían llamar la atención del público. Se equivocaron”, indicó en una oportunidad.

La vida de la joven cambió en 1989 con la creación del sello EMI, centrado en música latina. Su carrera tuvo el despegue necesario con el lanzamiento del disco homónimo y así en los años sucesivos: Ven conmigo, Entre a mi mundo y Live.

Selena consolidó su carrera musical, su disco Amor Prohibido fue número en ventas en Estados Unidos y en 1992 se casó con el cantante de heavy metal Chris Pérez, pese a la oposición de su familia en un principio. Además, llamó la atención de los medios de comunicación por su carácter, llamando a las mujeres a denunciar los casos de abuso.

“Si te están pegando, abusando y tienes miedo, no estás solo. La violencia entre la familia nos preocupa a todos”, llegó a afirmar.

Al momento de su asesinato, la cantante había ganado un Grammy por mejor álbum regional mexicano en 1993 y su disco Amor Prohibido había vendido más de 440 mil copias en los primeros meses de 1995, lo que la catapultaba como una de las grandes artistas latinas del momento y la de mayor proyección.

Asesinato

La popularidad de Selena seguía creciendo en 1993, cuando una enfermera desencantada de su profesión llamada Yolanda Saldívar se acercó al representante y padre de la artista, Abraham Quintanilla, lo ofreció fundar el primer club de fans de la artista.

El club pasó en algunos meses de tener 1.500 personas adscritas a 5.000 mil y Saldívar se ganó rápidamente la confianza de la artista, siendo la encargada de manejar alguna de sus cuentas, especialmente de una franquicia de tiendas de ropa.

La relación de confianza duraría hasta el 30 de marzo de 1995, cuando Selena y su esposo se reunieron con la mujer en la habitación 158 del Hotel Days Inn de Corpus Christi en Texas, la idea era pedirle explicación por irregularidades en el manejo de las finanzas y despedirla de forma definitiva.

En dicha reunión la mujer aseguró que había sido violada y se negó a entregar los documentos de finanzas que le habían solicitado, por lo que pospusieron la junta para el día siguiente. Selena la acompañó al hospital, donde descartaron cualquier tipo de abuso en contra de Saldívar.

Volvieron al hotel y comenzaron a discutir por los documentos que la enfermera se negaba a entregar, hasta que finalmente cedió y se confirmó que había robado a la artista. Selena intentó salir de la habitación. Eran las 11:48, cuando Saldívar le disparó apuntando a la espalda.

La cantante intentó pedir auxilio moviéndose y gritando por los pasillos del hotel, llegando hasta la recepción, donde se desmayó producto de la pérdida de sangre. De hecho, el rastro de su sangre quedó marcado por cerca de 100 metros.

Fue llevada rápidamente al Hospital Corpus Christi Memorial, donde se confirmó su deceso. Selena pasó de ser una de las artistas más populares de aquellos años e impulsora del Tex-mex y la electrocumbia , a una leyenda de la música latina.

Saldívar fue rápidamente detenida por la policía tras una amenaza de suicidio y luego de poco más de 5 meses de investigación y tres semanas de juicio oral, la mujer fue condenada el 23 de octubre de 1995 a cadena perpetua.

“Yo no quería hacer esto (…) Traje esta pistola para matarme, no quería dispararle a Selena”, reveló en una entrevista a Univisión en 2017

Desde entonces ha permanecido en prisión, generalmente en aislamiento debido a que varias reclusas la han amenazado con agredirla por su crimen y recién en 2025 podrá optar a la libertad.

Por su parte, la familia de Selena ha dicho que no les importa si la liberan, pues nada hará regresar a la joven.

“No nos importa si la sueltan hoy, nada nos va a devolver a mi hija (…) Ella puede decir miles de cosas, pero la realidad es que sí mató a mi hija y no fue un accidente”, afirmó Abraham Quintanilla a Univisión.

A más de 20 años del asesinato de Selena, la artista sigue siendo un referente para las artistas latinas y Netflix anunció que prepara una serie sobre su vida, la cual se estrenará en 2020 y será protagonizada por la actriz Christian Serratos, famosa por aparecer en The Walking Dead y la saga Crepúsculo.