La Comisión para el Mercado Financiero (CMF) publicó la nueva norma que implementa lo dispuesto en la Ley Fintec, conllevando el fin del conocido como feriado bancario, estableciendo nuevos estándares en materia de horario y disponibilidad de atención en los bancos.
Previa a la nueva normativa, la Ley General de Bancos señalaba en su artículo 38 que los bancos “no atenderán presencialmente al público los días sábado de cada semana y el día 31 de diciembre de cada año”.
Sin embargo, la Ley 21.521 (Ley Fintec) incluía modificaciones que eliminaban el mencionado beneficio. Las alertas en el sector saltaron en diciembre del año pasado, por lo que la CMF salió a explicar que hasta no se publicara la norma, el reemplazo aún no entraría en vigor.
Adiós al feriado bancario
Según explicó la Comisión, ahora el horario de atención en los bancos pasa a ser “el mínimo”, por lo que -en teoría- las sucursales podrían abrir por más tiempo. Con todo, este horario base sigue siendo de 09:00 a 14:00 horas de lunes a viernes, excepto en festivos y feriados. En Isla de Pascua, la franja horaria es de 08:00 a 13:00 horas horario insular.
Incluso, la norma establece que esta obligación mínima “no impide a la entidad atender en sábado o domingo, o fuera de dicho horario, no requiriendo autorización especial para ello por parte de esta Comisión”.
Este horario mínimo rige sólo para las sucursales, oficinas de apoyo y cajas auxiliares. Además, al ofrecer cuentas corrientes, a la vista, cuentas de ahorro, prepago o depósitos a plazo, los bancos deberán procurar las medidas necesarias de disponibilidad y acceso efectivo a los fondos.
Aquellas oficinas sin acceso directo a la vía pública -como la de los malls- podrán adecuar su horario según el del recinto donde se encuentra emplazados.
Exigencias en atención al público
“Las oficinas deben atender a todas las personas que ingresen al local, sin distinguir respecto a si se trata de personas que mantienen una relación contractual con el banco como, por ejemplo, las que contratan los servicios o productos ofrecidos, o que acuden a este en busca de alguna información o para realizar una operación esporádica, como aquellas que utilizan los servicios de cajas, ya sea para cobrar cheques o efectuar depósitos, pagar cuentas o realizar otros actos propios de la función de cajas”, señala la norma, señalando eso sí que nada impide la implementación de atención exclusiva para personas con ciertos productos, o incluso por razones de seguridad.
También, se establecen exigencias para la disponibilidad de canales digitales de atención.
Estos deberán tener una disponibilidad operativa mínima del 95% diaria y 99% mensual, considerando las 24 horas del día.
La normativa comienza a regir desde este 1 de agosto de 2025. Sin embargo, los bancos tendrán cuatro meses desde hoy para adecuar los sistemas y procedimientos para dar cumplimientos a lo exigido por el regulador en cuanto a la disponibilidad mínima de canales digitales y atención de consultas o reclamos.
Sindicatos rechazan la eliminación del feriado bancario
Desde la Confederación Nacional de Sindicatos de la Rama Bancaria, Filiales, Compañías de Seguros y de Apoyo al Giro (CONABAN) reaccionaron al anuncio y mediante una carta a la presidenta de la CMF, Solange Berstein, declararon tanto su sorpresa como descontento por la eliminación del feriado bancario.
Los sindicatos graficaron la decisión como el paso de “una aplanadora sobre temas que tienen que ver con derechos laborales adquiridos y ejercidos por décadas”.
En este sentido, afirmaron que la norma entraría a chocar con la Ley de Conciliación de la Vida Familiar y Laboral, y que incluso derechos parentales y maternales del Código del Trabajo se verían afectados por lo que los trabajadores señalan que será la eliminación de un día “que todos sabemos no es un feriado real para los trabajadores”.
Bajo este contexto, advirtieron que la eliminación de la fecha podría empeorar la calidad del servicio, dado que es un día usado para realizar ajustes y cierres contables. Así, el conjunto de los sindicatos de la banca pidieron a la CMF que se de pie atrás a la decisión y que, de lo contrario, “evaluaremos todas las acciones sindicales, legales, constitucionales y políticas, necesarias para impedir la vulneración de derechos a las trabajadoras y trabajadores de nuestro sector”.