A la recientemente promulgada Ley de Protección del Empleo -que surgió de la emergencia sanitaria por el coronavirus- ya han recurrido 23 mil compañías que optaron por la suspensión del vínculo laboral o bien por la reducción de jornada.

La Polar, Ripley, H&M, Starbucks, por nombrar algunas, tuvieron que acudir al estatuto al tener sus tiendas cerradas.

Durante las últimas horas se sumó Paris, Dominó y McDonald’s.

La primera está en similar escenario que todas las de su competencia: tiene sus sucursales cerradas a lo largo de Chile; y ha potenciado las ventas online.

Por ello, determinó acogerse a la Ley de Protección del Empleo, medida que incluye a Johnson y Eurofashion, también pertenecientes a Cencosud.

Según indicó la empresa, un 70% de los sindicatos adhirió a la determinación.

Las cadenas de comida Dominó y McDonald’s aplicaron de igual modo esta medida. Ambas compañías argumentaron que al no poder operar, la única opción para resguardar a sus empleados fue acogerse a la nueva ley.

“Tal como lo estipula la normativa, nos haremos cargo de los pagos previsionales de nuestros empleados, con quienes contamos para seguir generando empleos dignos y ser parte del gran impulso que requerirá Chile para la reactivación económica de todos los sectores y que sólo se puede lograr entre todos”, comentó McDonald’s en un comunicado.

Dreams Puerto Varas y Enjoy Chiloé

Los casinos de Puerto Varas y Chiloé igual se acogieron a la Ley de Protección del Empleo. Mediante un comunicado, Dreams y Enjoy anunciaron que por no tener ingresos debían suspender la relación contractual con sus trabajadores.

No hay claridad de cuántos colaboradores quedaron bajo esta medida en ambas empresas emplazadas en las provincias de Llanquihue y Chiloé.

Las firmas aludieron al nulo ingreso de dineros, lo que impediría seguir pagando las remuneraciones, a excepción de los anfitriones que trabajen en el contexto mínimo para resguardar la seguridad de los casinos, los que estén teletrabajando o aquellos que estén con licencia médica.