El alza en las tasas de interés tiene efectos importantes para la vida y el bolsillo, que en el corto plazo no son del todo agradables. Sin embargo, a mediano plazo esto logrará "ponerle freno a las presiones inflacionarias y lograr que los precios crezcan a niveles más sanos".

El miércoles, el consejo del Banco Central elevó en 125 puntos base la Tasa de Política Monetaria, hasta 2,75%, el ajuste más brusco en 20 años.

El movimiento superó todas las expectativas del mercado, que anticipaba alzas de hasta 100 puntos base.

El instituto emisor explicó al respecto que el escenario internacional cambió, se moderó la expectativa de crecimiento, aumentó la inflación y también el precio de los combustibles.

Por ese escenario, el apetito por riesgo disminuyó, debilitando a las monedas emergentes y el mercado bursátil.

Pero en Chile ese deterioro fue mucho más marcado, “por factores idiosincráticos, en especial el cambio en las perspectivas para la inflación y la incertidumbre sobre temas político-legislativos, particularmente respecto de nuevos retiros de ahorros previsionales”.

¿Cómo afecta esto en concreto a los chilenos?

Claramente, el alza en las tasas de interés tiene efectos importantes para la vida y el bolsillo de los chilenos.

Manuel Ugalde, jefe de Estudios de la empresa de inversiones XTB Latam, afirmó a BioBioChile que “parece existir la creencia de que un alza en las tasas de interés sólo trae efectos negativos, pero esto no es tan así”.

El experto detalló que el alza en las tasas de interés busca desacelerar la velocidad con la que crece la actividad económica, es decir, la demanda.

¿Por qué buscaría el Banco Central hacer esto? “En el corto plazo la oferta de bienes y servicios es relativamente estática, por lo que no puede responder rápidamente con mayor cantidad de bienes y servicios a aumentos explosivos en la demanda. Esto es lo que genera inflación”, señaló.

La inflación elevada, por su parte, tiene efectos nocivos para el bolsillo de los ciudadanos. “Es un proceso continuo que sucede día a día, mientras que los salarios de los ciudadanos sólo se ajustan esporádicamente, por lo que periodos prolongados de inflación elevada tienen efectos muy negativos para el bolsillo de los chilenos”, explicó Ugalde.

Créditos

El efecto positivo que persigue el Banco Central a través del alza en las tasas, por tanto, sería “ponerle freno a las presiones inflacionarias y lograr que los precios crezcan a niveles más sanos”.

“Es cierto que el proceso de ajuste en la inflación no es agradable y trae consecuencias negativas en el corto plazo. Entre estas consecuencias se encuentra un encarecimiento generalizado del financiamiento”, expresó el jefe de Estudios de XTB Latam.

Desde el mes de julio, cuando el Banco Central realizó su primera alza de tasas en la era post pandemia, han aumentado las tasas de créditos de consumo, créditos comerciales y créditos hipotecarios.

Estas tasas más altas significan que es más caro para las personas y empresas acceder a recursos para llevar a cabo sus proyectos de consumo o inversión a través del uso de deuda, lo que pone un freno al ritmo en que crece el consumo.

De acuerdo a Ugalde, el alza de tasas ayuda a frenar otro problema que hemos visto últimamente en nuestra economía y que afecta directamente a los ciudadanos: el alto precio que ha alcanzado el dólar.

“Mayores tasas de interés y menores presiones inflacionarias hacen que nuestra moneda se haga relativamente más atractiva, por lo que si el mercado ajusta sus expectativas de inflación a la baja podríamos comenzar a ver menores precios en el dólar, lo que a su vez también ayuda a disminuir la inflación ya que una parte importante de los bienes y servicios que consumen los hogares son importados”, concluyó.