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Resumen generado con una herramienta de Inteligencia Artificial desarrollada por BioBioChile y revisado por el autor de este artículo.

Un hombre de 60 años desarrolló bromismo, intoxicación por bromo, después de que ChatGPT le sugiriera consumir bromo para reemplazar la sal en su dieta. La IA no advirtió sobre los riesgos y el paciente estuvo consumiendo este químico durante 3 meses.

Un hombre de 60 años desarrolló bromismo, es decir, intoxicación por bromo, luego de consultarle a ChatGPT por una dieta más saludable, así lo reportaron científicos de la Universidad de Washington en un caso clínico.

Los antecedentes recogieron que la inteligencia artificial (IA) de OpenAI le sugirió al paciente el consumo de bromo, un elemento químico tóxico para los humanos.

De acuerdo con Science Alert, el paciente quería reducir su consumo de sal y le preguntó a ChatGPT con qué podía reemplazarla, a lo que la IA sugirió el bromo, pero no le advirtió sobre los riesgos.

Si bien el bromo se encuentra en sales naturales cristalinas, similares a la sal de mesa, no se puede consumir. De hecho, se utiliza para limpiar piscinas o fabricar productos químicos.

Un caso de bromismo por culpa de ChatGPT

El hombre que fue afectado terminó acudiendo a urgencias, ya que presentó delirios paranoicos y los médicos tuvieron que recetarle antipsicóticos.

“En las primeras 24 horas de ingreso, expresó paranoia creciente y alucinaciones auditivas y visuales, que, después de intentar escapar, resultaron en una retención psiquiátrica involuntaria por discapacidad grave”, describen el caso clínico.

El paciente manifestó que “tras leer sobre los efectos negativos del cloruro de sodio, o sal de mesa, en la salud, le sorprendió encontrar solo literatura relacionada con la reducción del sodio en la dieta. Inspirado por sus estudios universitarios de nutrición, decidió realizar un experimento personal para eliminar el cloruro de su dieta”, reocge el reporte.

Durante 3 meses, había reemplazado el cloruro de sodio por bromuro de sodio obtenido de Internet después de consultar con ChatGPT, en el que había leído que el cloruro se puede intercambiar por bromuro, aunque probablemente para otros fines, como la limpieza”.

Los científicos llamaron a tomar más precauciones con la IA, que, como han mencionado repetidamente los expertos, no puede entregar consejos de salud igual que un profesional.

“Es importante considerar que ChatGPT y otros sistemas de IA pueden generar imprecisiones científicas, carecer de la capacidad de discutir críticamente los resultados y, en última instancia, alimentar la propagación de información errónea”, concluyeron.

Referencia:

Audrey Eichenberger, Stephen Thielke y Adam Van Buskirk. Un caso de bromismo influenciado por el uso de inteligencia artificial. Annals of internal medicine: clinical cases, 2025.