Lo que parecía la columna de un dragón en la superficie de Marte, resultó ser un fenómeno rocoso producto del agua que alguna vez hubo en el planeta.

A inicios de abril de este año, el rover Curiosity de la NASA encontró unas extrañas formaciones en Marte, que muchos asociaron con la forma de una cola de dragón o los dientes de algún antiguo animal que pudo habitar su superficie.

De hecho, los mismos expertos se mostraron sorprendidos con esta figura. “En 20 años de estudiar Marte, esa es la roca más bizarra que he visto en mi vida”, comentó en Twitter la astrobiología Nathalie A. Cabrol, por ejemplo.

Esta curiosa roca fue encontrada por el rover en el Monte Sharp. Sin embargo, la agencia espacial ya determinó la explicación para este fenómeno, y no tiene que ver con marcianos. Pero sí con la existencia de agua que alguna vez hubo en el planeta rojo.

No era un dragón en Marte

Fue la en la cuenta de Twitter del mismo Curiosity donde la NASA aclaró el fenómeno. “Cuando el agua subterránea antigua fluía aquí en Marte, transportaba minerales que endurecieron la roca en algunos lugares más que en otros“, detallaron.

“Más tarde, los vientos erosionaron la roca, dejando atrás estas formas ‘funky’“, agregaron en el mismo mensaje.

Esta no es la primera vez que el rover se encuentra con extrañas figuras en Marte que causan revuelo por parecerse a objetos conocidos por los humanos en la Tierra.

Anteriormente, se creyó encontrar especie de puerta en la superficie marciana, aunque resultó ser un agujero entre las rocas. Por otro lado, también se han encontrado otras rocas con figuras de animales como osos o patos.

Este fenómeno se conoce como ‘pareidola’, que describe la tendencia humana a detectar objetos familiares con formas aleatorias. Como cuando vemos caras en los enchufes o en las manchas de la madera, por ejemplo.