El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, aseguró este sábado que ante los problemas de seguridad en la frontera con Venezuela se debería buscar colaboración entre los gobiernos en lugar de cerrar el paso binacional como lo ordenó el presidente Nicolás Maduro.
“Si es por cuestiones de seguridad, la respuesta no debería ser cerrar la frontera. Debería ser más bien colaborar de forma más eficaz con las autoridades colombianas”, dijo Santos durante un consejo de ministros en la ciudad de Bucaramanga (noreste).
El mandatario colombiano añadió que su país y Venezuela tienen “los mismos objetivos. Estamos buscando eliminar, sacar del juego, estas bandas criminales dedicadas a delinquir en la frontera”.
Santos dijo que con el cierre “los únicos que ganan son los delincuentes” y sostuvo que suspender el corredor binacional “trae inconvenientes, genera malestar, se pone a mucha gente inocente a pagar platos rotos”.
Maduro anunció el viernes la prolongación del cierre fronterizo, que se había iniciado el jueves en las localidades de San Antonio del Táchira y Ureña por 72 horas.
La medida se mantendrá por tiempo indefinido, mientras Venezuela declaró el estado de excepción en parte de la línea limítrofe tras un ataque de desconocidos con saldo de tres militares y un civil heridos.
“Después anunciaremos el alcance de este plan, pero esa frontera queda cerrada hasta nuevo aviso, hasta que regularicemos nuestra vida económica, social, hasta que capturemos a los asesinos queda cerrada esa frontera”, dijo Maduro por radio y televisión nacional.
Santos indicó que el próximo miércoles se reunirán las cancilleres de ambas naciones, María Ángela Holguín de Colombia y Delcy Ramírez de Venezuela, para buscar una solución conjunta.
El presidente anunció que su gobierno atenderá la situación de los colombianos deportados de Venezuela y de los habitantes de la zona de la frontera afectada por el cierre.
Venezuela y Colombia comparten una porosa frontera de 2.219 km, donde las autoridades de ambos países denuncian la actividad de grupos guerrilleros, paramilitares, narcotraficantes y contrabandistas de combustible y otros productos fuertemente subsidiados por el gobierno venezolano.