Por robo con homicidio fueron formalizados los cinco imputados por el asesinato del comunicador audiovisual Ángelo Quezada, a ocho meses del crimen que estremeció a la comunidad angelina.

El cuerpo del reportero deportivo fue encontrado la mañana del 19 de agosto pasado en el acceso al cabaret Casa Blanca, ubicado en calle Mendoza, sin que se conocieran las circunstancias de su deceso hasta la semana pasada, cuando se informó la detención de cinco presuntos implicados en el hecho.

Fue así como en el marco de la audiencia de formalización de cargos, el Ministerio Público expuso una serie de antecedentes e indicó que parte de los aprehendidos habría sustraído un vehículo desde Villa Balmaceda, en el que recogieron al resto del grupo.

De esta forma, habrían concurrido hasta el mencionado local nocturno cuando vieron al comunicador audiovisual hablando por teléfono en la vía pública, instancia en la que habrían decidido asaltarlo y sustraerle el celular, además de dinero en efectivo y una cajetilla de cigarros.

Aunque no existe claridad sobre quién o quiénes se bajaron del vehículo para perpetrar el robo, en la audiencia se señaló que uno de ellos habría propinado una certera estocada en el pecho a la víctima, dejándolo abandonado en el lugar para luego huir.

El fiscal Juan Carlos Vargas agregó que esta versión fue aportada por un testigo clave, que apareció tras la detención del autor confeso del crimen de Juana Rosa Cortez Rubilar, la mujer cuyos restos fueron encontrados quemados entre escombros el mes pasado.

El persecutor agregó que de esta forma lograron dar con el paradero de los cinco hombres -tres adolescentes y dos mayores de edad- por lo que ahora resta realizar nuevas pericias y una reconstitución de escena en el marco del plazo de dos meses que se decretó para la investigación.

En tanto Andrea Romero, defensora de los dos imputados mayores de edad, detalló que los antecedentes no son suficientes para acreditar el delito de robo con homicidio, ya que las versiones de los imputados son distintas.

Por su parte Marcos Quezada, hermano de la víctima, detalló que valió la pena esperar tras la suspensión de la formalización el sábado pasado, ya que es necesario reunir todos los antecedentes necesarios que permitan esclarecer las circunstancias reales en que murió el reportero deportivo.

Cabe señalar que el plazo que se decretó para la investigación es de dos meses, tiempo en el cual los mayores de edad quedarán recluidos en el centro de detención preventiva de Mulchén, mientras que los menores serán internados en régimen cerrado.

Con respecto a la pena, los imputados adultos arriesgan hasta 10 años y un día de cárcel, mientras que a los adolescentes -por la ley de responsabilidad penal- se les baja en un grado, es decir cinco años y un día, con la excepción de un joven de 15 años de edad, cuya condena no puede exceder los cinco años.