La Santa Sede evitó este miércoles comentar la decisión de Francia de “mantener” como único candidato para embajador ante el Vaticano a un diplomático homosexual.

“No es un asunto que atañe la oficina de prensa de la Santa Sede, es una cuestión entre Estados”, afirmó a la AFP padre Federico Lombardi, portavoz del Vaticano.

El portavoz del gobierno francés, Stéphane Le Foll, confirmó este miércoles la decisión de Francia de mantener la candidatura de Laurent Stefanini, de 55 años, un diplomático de reconocida experiencia, pero que según los medios franceses, habría sido rechazado por su condición de homosexual.

“Francia optó por un embajador ante el Vaticano. Esa opción fue el señor [Laurent] Stefanini y esa sigue siendo la propuesta de Francia”, declaró Le Foll, al término del Consejo de Ministros.

“Hay negociaciones. Cada embajador debe recibir el placet en todos los lugares en los que los nombramos” y “esperamos la respuesta del Vaticano”, pero “la posición de Francia no cambia, hemos propuesto a Stefanini para ser embajador en el Vaticano”, insistió el portavoz del gobierno.

Tres meses después de la designación de Stefanini como embajador ante el Vaticano, París sigue esperando el beneplácito de las autoridades religiosas.

Un silencio que suele ser interpretado como una negativa, por lo que en general el país afectado termina por retirar la candidatura.

Pero con la llegada de papa Francisco, y sobre todo teniendo en cuenta su visión sobre el tema, al haber reconocido públicamente que “si una persona es gay y busca al señor y tiene buena voluntad ¿quién soy yo para juzgarla?”, se esperaba mayor apertura.

La insistencia de Francia deja entrever que hay espacio para negociaciones.

Tampoco se excluye que el papa argentino intervenga personalmente en el caso ya que el candidato, considerado un diplomático intachable, goza del apoyo de los obispos de Francia así como del camarlengo de la Iglesia, cardenal Jean-Louis Taurant y el arzobispo de París, André Armand Vingt-Trois.

Stefanini, soltero, es considerado una persona muy discreta. Según el diario italiano Il Messagero es un “católico practicante, muy cultivado y de discreción absoluta”.

Además tiene un “profundo conocimiento” de los temas vaticanos, ya que fue de 2001 a 2005, el número dos de la embajada francesa ante la Santa Sede.

La posición del papa argentino en asuntos como los curas pedófilos y su apertura en temas como la homosexualidad y el divorcio le han granjeado una popularidad generalizada pero la demora del Vaticano en conceder el plácet a Stefanini hace pensar que existen muchas resistencias dentro de la Curia Romana.

No se trata de la primera vez que el Vaticano no aprueba el nombramiento de un diplomático francés, país que no tuvo embajador por casi un año entre 2007 y 2008 por haber propuesto a Jean-Loup Kuhn-Delforge, abiertamente gay.