Personal del OS 11 de Carabineros incautó cerca de 4 mil elementos de pirotecnia que serían comercializados en Santiago.

La acción se desarrolló en el marco de un servicio preventivo de los efectivos policiales con miras a las fiestas de fin de año.

De esta manera, dieron con dos comerciantes irregulares del Barrio Meiggs que vendían los artículos, de procedencia oriental.

Carabineros precisó que los fuegos de artificio ingresaron al país bajo el rótulo de “otras especies”, burlando con ello los controles aduaneros.

Cabe destacar que esta clase de prácticas no es delito, sino una infracción a la Ley de Control de Armas, por tanto los sujetos sorprendidos arriesgan un multa de entre 10 y 50 UTM.