Carabineros en la Quinta Vergara logró detectar 30 entradas que habían sido robadas en la Región Metropolitana a la empresa a cargo de la venta de los tickets del Festival de la Canción. Según fuentes policiales, se trataría de más de mil de estos talones que fueron sustraídos y que están en circulación.

Este año la producción junto a la empresa dispusieron un sistema de control con los códigos de barra en los accesos a la Quinta Vergara y fue durante la segunda jornada del festival, cuando Carabineros detectó al menos 30 de estas entradas que habían sido robadas.

Al momento de ingresar el primer asistente de inmediato se anuló el código de estas entradas, dejando a la persona que intentó ingresar posteriormente sin poder hacerlo, según comentó el mayor de Carabineros Felipe Neira, quien estuvo a cargo del procedimiento.

Neira explicó que quienes hayan adquirido este tipo de entradas robadas también se exponen a multas e incluso penas de cárcel, ya que el uso malicioso de estos instrumentos son calificados como delito por el Código Penal.

El modus operandi de la banda delictual consistió en robarse los mil talones en diciembre del año pasado, pero sin la información del evento, y a través de un sofisticado sistema de impresión lograron clonar la información de entradas originales.

Pero, ¿qué pasa si el primer ingreso lo registra una de las entradas robadas? El oficial de Carabineros dijo que a pesar de la intensificación de los controles anunciados por la empresa y la producción, por ahora sería imposible diferenciar cuáles tickets son reales o falsos.

Carabineros explicó que oficialmente ya no hay entradas disponibles para ningún día, por lo tanto, adquirir un ticket en las afueras de la Quinta Vergara o en sus alrededores es arriesgarse a estar comprando uno de estos boletos adulterados.