Los senadores UDI, Hernán Larraín y Jaime Orpis, coincidieron este domingo en la necesidad de reactivar el proyecto de reforma constitucional, de septiembre de 2004.

Dicho proyecto de reforma establece una inhabilidad a todas las autoridades establecidas en la Constitución, de ejercer un cargo público si consumen drogas ilícitas.

Esto, a propósito de la polémica suscitada en los últimos días, después que el senador Fulvio Rossi (PS) dijo que fumaba marihuana 1 o 2 veces al mes.

El senador Orpis expresó que “es fundamental que la Comisión de Constitución y Justicia de la Cámara de Diputados coloque en tabla la modificación”.

Orpis dijo que el gran desafío del país es buscar la forma de cómo reducir el consumo de todo tipo de drogas y sería un contrasentido que Chile aprobara el consumo de marihuana.

El Senador explicó que Alaska, a principios de la década del ’70, fue el primer estado que legalizó la marihuana, y 5 años después el consumo se había más que duplicado.

“De manera que es fundamental establecer la inhabilidad de ejercer un cargo público en algunos de los poderes del Estado, el ser consumidor”, añadió Orpis.

Por su parte, el senador Hernán Larraín, dijo que “Chile, tanto en los gobiernos de la Concertación como en el actual, han considerado que las adicciones a las drogas, incluida por lo tanto la marihuana, son negativas”.

“De manera, que es de una tremenda irresponsabilidad que una autoridad públicamente admita su consumo, y eso lo que hace es legitimar ante los jóvenes y en la discusión pública que este es un consumo posible y deseable, nos parece eso gravemente irresponsable”, añadió.

“Las autoridades no pueden consumir drogas, precisamente porque el ejercicio busca evitar en Chile el consumo de las drogas, y es contradictorio que una autoridad busque por una parte evitar el consumo y por otro lado lo admita que lo consume”, sentenció Larraín.