Según confirmó carabineros, la banda llegó con sus rostros cubiertos, para no ser identificados, hasta el peaje de La Unión. En el lugar se dirigieron directamente a la bóveda en donde estaba el botín, y que contenía la recaudación de todo el fin de semana.

Los encapuchados derribaron el acceso con un “riel de tren”, para después arrastrar la caja fuerte con un alambre acerado, el cual estaba era sujetado a una camioneta, vehículo que había sido robada el sábado recién pasado en la ciudad de Villarica.

Pero el robo se frustró por ellos mismo, debido a que los siete individuos no fueron capaces de subir la caja a la carrocería. Además, por la eventual llegada de carabineros decidieron huir del lugar con las manos vacías. Así lo confirmó el subcomisario de la 3era Comisaría de La Unión, capitán Pedro Montecinos.

Los delincuentes terminaron con los neumáticos pinchados por sus mismo miguelitos, debiendo abandonar la camioneta a unos 300 metros al norte del lugar. A juicio del oficial, los ladrones se pusieron nerviosos.

Este particular grupo de asaltantes aún permanece prófugos, los que son intensamente buscados. Además, el Laboratorio de Criminalística de Carabineros de Valdivia quedó a cargo de analizar las huellas dejadas en el lugar.