Los principales candidatos a la presidencia guatemalteca, los derechistas Otto Pérez y Eduardo Baldizón, abrieron sus vidas privadas a la prensa este sábado de veda proselitista para, sin violar la legislación, seguir ocupando espacio en los medios y difundir sus imágenes.
Pérez, el general del Partido Patriota que siempre se presenta en jeans y anticipa un gobierno de “mano dura”, recibió a la prensa en su casa, donde se exhibió jugando baloncesto con sus nietos.
Baldizón, el joven empresario tildado de engreído y quien promete aplicar la pena de muerte y clasificar a Guatemala a un mundial de fútbol, dio cita a la prensa en un restaurante de comida rápida típica (pollo frito muy condimentado) donde se dejó fotografiar comiendo en compañía de su esposa e hijos.
Pérez lidera todas las encuestas con una intención de voto que oscila entre 42% y 47%, insuficientes para que pueda ganar en una primera vuelta, pues necesita la mitad mas uno de sufragios. Baldizón, unos 20 puntos detrás, pelea voto a voto para tratar de forzar el balotaje del 6 de moviembre.
El tercero en las encuestas, el también derechista Eduardo Suger –un científico físico-matemático que reúne un 15% de intención de votos– informó a la prensa que iba a asistir a un oficio religioso católico este sábado luego de un almuerzo familiar
Un total de 7,3 millones de electores están habilitados este domingo en unas elecciones donde no hay candidatos del oficialismo socialdemócrata, que fracasó en resolver los problemas de galopante inseguridad y miseria: mitad de la población en la pobreza y dos millones de desnutridos.
Además de presidente y vice, los guatemaltecos eligen 158 diputados al congreso unicameral, 333 alcaldes municipales y 20 diputados al Parlamento Centroamericano.