Los constructores de automóviles alemanes Volkswagen y Porsche anunciaron el jueves que no lograrán cerrar su fusión en los plazos previstos inicialmente, es decir antes de fines del presente año, según comunicados separados.

“El objetivo de formar un grupo de fabricantes de automóviles integrado sigue vigente”, precisó no obstante Volkswagen.

Los dos grupos aluden, para explicar este contratiempo, a un riesgo jurídico relacionado con demandas en Estados Unidos de varios fondos de inversiones estadounidenses, y a una investigación en Alemania.

“Desde el punto de vista de Volkswagen, los obstáculos jurídicos persistentes no permiten evaluar el riesgo económico de una fusión, y en consecuencia determinar una valorización de Porsche SE, necesaria para establecer la tasa de intercambios” entre las acciones de los dos grupos con miras a su unión, declaró el primer fabricante de automóviles europeo.