El seleccionador de fútbol de Perú, Sergio Markarián, moduló el miércoles el tono de su ira luego de las explosivas declaraciones contra técnicos y periodistas que lo tildaron de defensivo, pero mantuvo su enfado con el arbitraje del brasileño Salvio Fagundes en la Copa América-2011.

“No me preocupa que un árbitro se equivoque, entiendo que puede tener errores, pero que me expliquen las autoridades cómo se vuelve a programar a (Salvio) Fagundes después del error que cometió en el partido Argentina-Colombia”, remarcó Markarián en conferencia de prensa.

El estratega uruguayo del combinado inca desató el martes su bronca contenida contra quienes lo etiquetan de técnico defensivo, prometiendo desenmascararlos, tras la derrota de Perú (1-0) ante Chile por el Grupo C del torneo continental.

En tal sentido, más tranquilo con el paso de las horas, pero igualmente irritado, Markarián explicó que “a muchos medios (de prensa) les gusta etiquetar y otros con más amplitud aceptan que cada uno puede jugar como puede, o como quiere o como le guste”.

Sostuvo que se ha hecho frecuente decir “se metieron atrás, jugaron con dos líneas de cuatro, como jugar con dos líneas de cuatro fuera el diablo, va a llegar el momento en que le preguntarán al rival cómo querés que te marque”.

En efecto Markarián se preguntó, “¿a caso Bolivia tiene que venir a ser goleado por Argentina, a no tratar de maximizar los recursos que tiene?”.

Sin embargo, cuando se le preguntó los nombres de los responsables, respondió “no voy a abrir nuevos frentes como posición estratégica, en su momento me ocuparé”.

En cambio no evitó salir al cruce del colegiado brasileño Fagundes, a quien responsabilizó de condicionar a Aldo Corzo con una prematura amonestación y de expulsar indebidamente a Giancarlo Carmona, en el partido frente a Chile.

“Cuando un técnico se equivoca lo echan, cuando un jugador se equivoca lo sacamos (…) y cuando se convalida una cosa de ese tipo (la continuidad de Fagundes en el torneo) el mensaje es ‘por este camino vas bien’ y si ese es el mensaje tiemblo”, reveló el entrenador.

Markarián, de 66 años, y dilatada trayectoria en el fútbol de Paraguay, Chile, Perú, México, Grecia y Uruguay, desconcertó a la prensa al apartarse de su habitual tono afable y cordial, para ir al choque contra quienes le hicieron perder la paciencia.

“A veces hay que enojarse, esto demuestra que en general tengo buen humor”, justificó el DT.

Con 4 unidades, producto de una victoria y un empate, Perú avanzó a los cuartos de final de la Copa América como tercero de su serie y espera rival en la próxima fase del certamen.

“Le hemos ganado al descreimiento, ahora aspiramos a ser un buen cuarto de final y jugar los seis partidos (de la Copa América), porque para Perú cada partido es oro, cada partido me permite descubrir cosas que pueden servir de futuro, aún perdiendo”, puntualizó.

Empero, recalcó que Perú “tiene muy claras las ideas en cuanto a cuál es su principal objetivo”, en alusión a obtener su boleto al Mundial de Brasil-2014.

“En el momento en que asumí Perú no tenía equipo y contaba con pocos jugadores consolidados”, recordó Markarián, quien toma la Copa América como banco de pruebas que le permita armar un plantel “que juegue lo mejor posible, para pelear las eliminatorias en condiciones de aspirar a la clasificación”, concluyó.